Aficionados al borde de un ataque de nervios

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'La juventud no es un tiempo de la vida, es un estado del espíritu' (Mateo Alemán)

El Nàstic se debate en una dicotomía existencial entre lo etéreo y lo palpable. Juega bien, pero sigue sin ganar.  Kiko apostó por la revolución, 'la juventud al poder', y le salió medianamente bien. Los chavales (Fran, Benito, Aleix y Eugeni) cumplieron con creces y el equipo hizo méritos para ganar al Badalona que hacía 35 temporadas que no pisaba el Nou Estadi en partido de liga, pero no supo lograrlo.

En la fria noche del miércoles el once tarraconense apostó por el futbol de toque, de pase corto, de combinación, pero se excesió en los metros finales donde quedó huérfano de pegada. Hubo ocasiones pero se esfumaron con una mala definición. En el primer tiempo se jugó a arreones, con poca continuidad, le faltó pausa y olvidarse de la ansiedad. En la segunda parte Kiko arriesgó pero sus futbolistas seguían teniendo el punto de mira del cañón desviado de los tres palos.

'The Artist' (Eugeni) disputó sesenta minutos maravillosos, con cambios de orientación, control del balón, recuperaciones y disparos a puerta pero en el tramo final su cerebro futbolístico se fue nublando, a sus 18 años no se le puede exigir más, tampoco a Fran Velez se le puede pedir que además de defender bien sea el jugador que inicie el juego creativo del equipo desde la línea de retaguardia. Cada jugador debe desarrollar el rol que se le encomiende.

Falta aún adaptación a la Segunda B (la catgoría maldita), leer los partidos en clave pragmática pues lo importante, lo trascendente  es vencer, luego si hace falta ya vendrá el espectáculo. Para cerrar los encuentros antes hay que abrirlos. Si algo quedó patente ante el equipo escapulado fue la excelente preparación física del equipo (bravo por Jordi Abella) los visitantes hicieron un bajón físico espectacular en el último cuarto de hora.

El equilibrio pasa por tener mayor contundencia defensiva y acierto ofensivo, por que de ocasiones se pudieron contar más de media docena, pero no hubo la serenidad precisa para transformarlas en gol; ahora para ahuyentar los fantasmas se precisa un trabajo más de sicólogo que de entrenador.

Rubén estuvo perfecto con tres intervenciones muy delicadas; mejor en ataque que defendiendo Benito, al revés que Fran Velez. Eficaz Aleix Coch y correcto Ñoño. En el medio campo gran trabajo de Rodri y el ya comentado de Eugeni. En las bandas desacoplado Bueno y penetrante Quintana.  Oscuros y con falta de recursos técnicos Uriarte y Arriaga. Haro le puso salsa picante a la banda zurda, mientras que De la Espada y Eloy practicamente no pudieron entrar en juego, les faltaron minutos.

Qué toca ahora?. Paciencia, arropar al técnico y esperar que la primera victória rasgue el mal fario de cara a gol. Quiero pensar que este Nàstic tiene perfil de Segunda Vuelta, pero hay que evitar descolgarse en la primera.

PD.- El domingo 7 de octubre el Nàstic-Binissalem está señalado para las 12 del mediodía coincidiendo con el Concurs de Castells de la Tarraco Arena, ¿se ha pensado ya en evitar la coincidencia?..