Arenas movedizas

Arenas movedizas

23:01  

Equipo temporada 1965/66

Sí, las arenas movedizas existen; suelen aparecer alrededor de los lagos o zonas pantanosas. En muchas películas hemos visto como uno de los protagonistas se precipita en el lodazal movedizo y comienza a hundirse sin fuerza para expulsarse hasta la orilla. Si es el malo, se hunde sin remisión, si resulta ser el bueno siempre encontrará una rama de árbol que le permita asirse pa ella para llegar hasta la tierra seca.

El Nàstic ha entrado en zona pantanosa como los Everglades de Miami y está cerca de caer en la zona de arenas movedizas y solamente falta por saber si encontrará la rama del árbol que sea lo suficientemente resistente que le permita volver a pisar zona segura o lo engullirá la arena cenagosa. El equipo de Nano precisa hallar el equilibrio, la equidistancia y sobre todo tomar riesgos medidos. En Alcorcón el partido fue para sacar los colores, para desesperar a los aficionados y sobre todo para meditar sobre el futuro del equipo.

El problema del Nàstic quizás circule alrededor de la letra M (y no me refiero a que practique un fútbol de Mierda), me refiero a nombres propios; Molina y Minero (Abraham) necesitan descanso porque están atravesando una crisis de juego; Muñiz sigue siendo un jugador indefinido que no suele aportar; con Morente se han empecinado en su titularidad cuando existen otras alternativas; a Maikel Mesa se le ha castigado injustamente a la suplencia; Márquez aun no ha podido cambiar el chip del soccer americano; y Matilla ha sido un fichaje frustrante por lo aportado hasta ahora. La única M que funciona es la de Manu.

Va siendo hora de encontrar el once adecuado y esto se logra cuando todos lo sabemos de memoria y lo podemos cantar de carrerilla,  aún recuerdo el once que quedó campeón de Tercera la temporada 1965/66, yo aún no había cumplido los doce años; Vilanova; Vicente Pascual, Roselló, Arribas; Echeverría, Boada; Añil, Juanín, Serer, Cantón y Blázquez, repitieron en 24 partidos de treinta y ocho jornadas.

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La palma el Nàstic en Alcorcón

La palma el Nàstic en Alcorcón

18:03  

Sin lugar a dudas Bernabé Barragán fue el mejor

En Santo Domingo el Nàstic sufrió un mal Domingo de Ramos y palmó con justicia ante un rival que puso mejor actitud pero que estuvo huérfano de fútbol. Lo que se vió recordó más a un partido de Segunda B que uno de la Liga 1,2,3. Los tarraconenses tropezaron con una piedra a los cinco minutos y fueron incapaces de levantarse. El gol amarillo vino precedido de dos claros errores Javi Jiménez concede el centro y Dorca se anticipa con holgura a Suzuki.

La alineación que presentó Nano sobre el césped era un puro jeroglífico egipcio y no digamos las pres permutas que realizó en la segunda parte. Cierto que el equipo acudía con cinco bajas (Dimitrievski, Kakabadze, Fali, Pleguezuelo, Javi Márquez) pero la convocatoria era rica en matices y permitía elegir mejor para contrarestar las virtudes (pocas) del rival. Volvió la defensa a estar sincopada, sin ayudas naturales y suerte que el portero Bernabé tuvo una mañana inspirada. La propuesta de Nano de conseguir el balón con el tanteador adverso puede resultar siempre y cuando imprimas velocidad en las contras, pero el Nàstic estuvo lento y previsible.

Nadie fue capaz de llevar la manija del partido, Gaztañaga porque no es su perfil y Tejera porque se ausentó con excesiva frecuencia del juego; y claro, pretender que Muñiz desde la banda coja la batuta es una pura utopía, porque lleva partidos que ni está ni se le espera. Tanta triangulación, tanto sobar el balón y tanto pase horizontal para luego mandar un pase frontal a Manu Barreiro es desperdiciar tiempo y oportunidades. Ah¡ y Uche estuvo ahogado entre líneas sin despertar.

Los últimos diez minutos del primer tiempo y los quince iniciales del segundo fueron lo menos gris del Nàstic, se estiró más y llegó tres veces a las cercanías del área chica, pero luego llegaron los cambios tan inexplicables como el cambio climático, marcha Manu y entra Dumitru, se va Gaztañaga y sale Álvaro, y el tercero aparece Maikel (faltaban cinco minutos) por Uche.  Y saben como acabó el partido en el tercio final?, con balones directos al área y Barreiro en la ducha?, saben que pasó cuando marchó el pivote defensivo y entró el delantero?, que aquello fue una pérdida de control monumental y saben que pasó cuando entró Mesa?...que las manecillas del reloj ya acariciaban el minuto noventa.

En Santo Domingo (fue santificado por el Alcorcón porque haciendo lo mínimo sumó tres puntos) el Nàstic estuvo mal y Nano con el planteamiento y los retoques posteriores, peor. Creo que hay exceso de improvisación y no me extraña que el aficionado se queje del artículo del pasado miércoles donde pedía evitar los silbidos a los jugadores en casa. Próximo rival en casa el Lugo, la única esperanza es que se celebra el Domingo...de Resurrección y a eso podamos agarrarnos.

1x1 (Puntuación del 1 al 10)

BERNABÉ (8): Vendido en el gol; intervino con acierto en al menos cuatro ocasiones: decidido en las salidas con los puños. Lo mejor del partido.

ABRAHAM (3): Muchos problemas atrás para parar a los rivales, embarullado en la salida de balón. Invisible en ataque.

JAVI (3): Culpable en el centro del gol, precipitado en los pases; subió pero no supo aprovecharlo. Blando en defensa.

SUZUKI (4): Responsable del gol. Luego enmendó y supo ser más contundente. Por el centro hubo excesivas grietas.

MOLINA (4): Dudas para defender el eje de la zaga, faltó contundencia en el despeje; al final regaló balones largos inalcanzables.

GAZTAÑAGA (6): El más entonado del centro del campo en labores de destrucción. Supo fijar su zona, le faltaron ayudas.

TEJERA (5): Se le necesitaba mucho más, armó alguna contra pero en un partido muy apagado. Le faltó tomar el mando.

MUÑIZ (3): En Alcorcón no estuvo ni a balón parado; escorado en la banda pierde protagonismo; le faltó más verticalidad y ambición.

TETE (4): Tuvo la banda para él pero no supo resolver los uno contra uno; en la segunda parte inexistente.

UCHE (4): Lento, incómodo, poco activo y sobre todo sin saber conectar ni con las bandas ni con el ariete.

MANU  (6): El único que lo intentó, bregando y buscando el disparo. Nada que reprocharle, aunque el colegiado le perdonó la segunda amarilla.

DUMITRU (6): En partido feo y de mucha conducción le puso velocidad pero no dispuso del acompañamiento preciso.

ÁLVARO (4): Inadvertido, poca presencia aunque creo que era jugador para salir en el once inicial.

MAIKEL (-): Se le esperaba mucho antes sobre el irregular césped de Alcorcón.

NANO (1): No entendí ni la alineación, ni los cambios, ni el sistema que utilizó en los últimos minutos para regalar todos los balones al rival.

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Tiempo de silencio

Tiempo de silencio

17:59  

Esta debería de ser la actitud.

Se imaginan a un cirujano que cuando está operando una apendicitis tuviera al fono del quirófano a un grupo que le silbara o insultara?, o a un mecánico comprobando el sistema eléctrico de su vehículo  mientras usted le increpa y abuchea?, o servidor mientras escribo esta crónica tuviera a media docena de pesados que faltan al respeto y me pitan?. Seguramente el trabajo del médico, del mecánico y del mío no saldrían con la pulcritud necesaria porque estaríamos trabajando presionados.

En el fútbol sucede lo mismo pero aumentado por cien porque se trabaja ante miles de personas que tiene por costumbre juzgar cada intervención. Sugiero que lean la tremenda entrevista a André Gomes en la revista Panenka, brutal el saber gestionar la presión, el pánico y la responsabilidad. El futbolista es consciente del rol que desempeña en el césped y de la intransigencia de ciertos espectadores que se creen, por el mero hecho de pagar una localidad, con derecho a la falta de respeto.

Viene esta reflexión a cuento por lo que hemos visto en los últimos partidos en casa con ciertos aficionados y los jugadores del Nàstic. Marcador en contra y en las gradas se percibe un murmullo de desencanto que se torna en silbidos para acabar con pañuelos blancos. Error si se creen que así se motiva al futbolista.

El jugador se bloquea más, duda en arriesgar, aumenta su presión y disminuye su autoestima circunstancias que por desgracia se contagian al resto de compañeros. Sin el preciso calor de las gradas, sin la vinculación espectador-jugador es muy difícil que se puedan levantar los resultados. Por eso es preferible antes que los pitidos un Tiempo de silencio, que ha resucitado en mi memoria porque fue una de las primeras novelas que leí en la Facultad de Literatura Española. Única novela de Luis Martín Santos publicada en 1962, ya que dos años después moría en un accidente de circulación. Ah¡ por cierto el argumento va de un médico que decide ser investigador científico pero ante la falta de apoyo de su entorno fracasa.

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Malas intenciones

Malas intenciones

22:18  

Manu fue el más ofensivo gol anulado (injustamente) y travesaño.

Quienes me conocen saben que nunca me gustó airear las malas sensaciones ante un arbitraje caprichoso y erróneo. A veces es saludable saltarse la norma. El Nàstic ha encadenado tres arbitrajes con decisiones equívocas en su contra; frente al Tenerife (Víctor Areces), en Granada (Pulido Santana) y ante el Córdoba (De Mena Escuderos).  Y claro uno comienza a maquinar si en realidad puedan existir malas intenciones. El Córdoba parece ser un equipo claramente protegido, no interesa que descienda porque reúne a 20.000 espectadores en El Arcángel por las miserias que acuden a los campos del Sevilla Atlético, Alcorcón, Lorca o Reus.

Ojo al dato (como diría el maestro García), de los últimos cuatro partidos del conjunto cordobés ha sumado los doce puntos con los siguientes detalles ciertamente sospechosos; de local ante el Valladolid, levantó un 0-1 con los visitantes con diez jugadores desde el minuto 56 y cinco amarillas; en Alcorcón 1-2, remontando un 1-0, gol anulado y penalti no señalado a los locales; en casa frente al Lugo gana 1-0 pero los gallegos juegan con diez todo el segundo tiempo y ven 9 amarillas por 1 los locales, se quejan de un penalti no señalado. Y en el Nou Estadi ya lo vieron la correcta señalización de los fueras de juego hubiese dejado el 1-0 al descanso.

Al margen la labor arbitral el Nàstic hizo una primera parte átona, apagada, sin capacidad para imprimirle ritmo al partido. Márquez no supo abrir las jugadas y en las bandas Omar y Tete no pudieron saltar el cerrojo andaluz. La lesión de Reyes permitió al Nàstic asomarse al balcón pero sin abrir del todo la puerta. El gol en fuera de juego de Aythami y el tanto de Barreiro anulado por fuera de juego inexistente hizo que a la ducha se fuera con el luminoso invertido. El hechizo maléfico del Nou Estadi planeaba ya sobre las gradas.

La segunda parte ofreció otra cara, otra versión del Nàstic, se fue a por el empate con Tejera más predispuesto que Márquez y con una banda, Tete que se activó; pero al equipo le seguía faltando agilidad, mayor velocidad y desmarques más instintivos. El Córdoba se limitó a posicionarse atrás (igual que el Nàstic hace en las salidas). Hubo ocasiones de Tete, Manu, Pleguezuelos y Dumitru, pero deslavazadas y sin continuidad. Se echó  en falta el espíritu y el ímpetu que los granates despliegan en los partidos en campo forastero, el marcador adversó hace menguar la actitud de los futbolistas tarraconenses.

Nano arriesgó con el último cambio quitó a Fali por Uche y ahí dictó sentencia porque si el empate se rozaba, con el cambio que dejó huérfano el centro del campo, vino la puntilla del Córdoba con un gol de Sergio. Faltó paciencia en el último cuarto de hora, se fue con demasiada ansiedad a por el gol.  Y al final otra derrota en casa y van diez y los aficionados saliendo del Nou Estadi muy tocados. 

1x1 Puntuación del 1 al 10

DIMITRIEVSKI (5): Poco exigido todo el partido se le vio nervioso en el inicio de las jugadas; en el primer gol reaccionó un poco tarde.

KAKABADZE (8): Su juego ofensivo fue de matrícula la jugada del gol anulado es para guardar en la retina de por vida. En defensa anduvo más exigido.

ABRAHAM (7): Incansable en los desdobles, creó peligro en ataque y en defensa aguantó el tipo. Bajó el ritmo en el último cuarto de hora.

ARZO (6): Sobrio y contundente a la hora de defender pero le quemó la pelota en los pies a la hora de iniciar las jugadas.

PLEGUEZUELO (7): Tuvo dos remates a puerta, fue quien intentó jugar desde la zaga, acudió bien al corte aunque en ocasiones asumió mucho riesgo.

FALI (6): En tareas de destrucción estuvo enorme pero quiso hacer más de lo que puede a la hora de fabricar jugadas, por ahí le vino la amarilla.

MARQUEZ (3): No supo llevar las riendas, llegó tarde a los cruces y le perdonaron la segunda amarilla (aunque la primera fue excesiva). Juega más cómodo en posición más adelantada.

TETE (7): Primer tiempo flojo sin desborde; luego se hizo con la banda y fue un tormento para la defensa cordobesa.

ÁLVARO (4): Lento cuando tuvo el balón; apareció poco y no tuvo las ideas claras. Se fue diluyendo con los minutos.

OMAR (3): Negado para el desborde, no estuvo cómodo y falló en exceso. Tuvo tendencia a ir hacia el centro y abandonar su zona.

MANU (7): Volvió a descolgar balones y provocar faltas (algunas no señaladas) un gol injustamente anulado y un travesaño.

TEJERA (5): Aportó más que Márquez pero aun está lejos del de otras temporadas. Abusó del dribling por el centro.

DUMITRU (6): Imprimió mayor velocidad al fútbol, un enorme tiro lo desvió el meta visitante. Buscó siempre la verticalidad.

UCHE (4): No aportó porque jugó en una posición que no le resulta familiar. No aprovechó su frescura en ataque.

NANO (4): Se equivocó en el doble pivote inicial pero supo remediarlo en el segundo tiempo aunque pudo hacer otros cambios.

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De guerras y guerrillas

De guerras y guerrillas

18:47  

Todos unidos en pos del gol, la victoria y los tres puntos.

En la galaxia futbolística siempre han existido y existirán guerras de los clubes externas o intestinas y normalmente no suelen acabar bien pero tal vez las heridas que dejan cicatrizan con mayor facilidad.  El Nàstic ha vivido batallas intensas como la del despilfarro nunca justificado de la etapa de Xavier Salvadó, la expoliación de los tres puntos frente al Atlético Baleares nunca se depuraron responsabilidades o la gran batalla perdida en Llagostera donde el atraco fue del calibre del Tren de Glasgow. 

La guerra de guerrillas es más cruenta, más larga y suele dejar más cadáveres (y si no que se lo digan a los americanos con el Vietcong o a Colombia con las FARC).  El Nàstic vivió recientemente alguna guerrilla como la denuncia de Alberto Benito, el fraude de Jose Sicart o la actitud de Emaná en el Hotel de Cádiz.  Siempre los ataques guerrilleros y ahora más con las redes sociales como gran arma de demolición suelen infringir daños colaterales. Varios clubs ahora mismo tienen batallas internas montadas como Málaga, Córdoba, Alcorcón, Getafe, Cultural o Deportivo, la mayoría en zona de descenso.

En el Nàstic se acaba de abrir una contienda o cruzada más bien nihilista. El punto de partida fueron unos comentarios muy incisivos y críticos de Toni Pinilla en las transmisiones televisivas de los partidos del Nàstic. Tal vez la equidistancia de un analista, hablo como periodista, el exdelantero del Nàstic no la haya tenido. Creo que conociendo a Pinilla no ha sido por mala fe sino porque opinaba desde la perspectiva de conocedor de la casa por sus excelentes años como futbolistas y sus opacas temporadas como director general.

Pero partamos de la premisa que estamos en una democracia (aunque con el gobierno del PP hay veces que lo dudamos) y cada uno es libre de opinar lo que le plazca. Emilio Viqueira como máximo responsable de la confección de la plantilla le contestó harto de los comentarios pero cometiendo el error de buscar el insulto para defenderse. Error. Al trapo también entró Nano que de hecho ahí era un convidado de piedra y mucho más al emitir el juicio antes del transcendental partido de  Los Cármenes. Y la guinda al pastel llegó desde el club que vino a decir que solamente las opiniones de los socios tienen validez.

Evitemos conflictos innecesarios, guerrillas de barra de bar y centrémonos todos en unir esfuerzos para eludir cuanto antes los puestos de peligro. Lo digo y repito, ojo con las redes sociales porque las carga el diablo.

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El Nàstic gana Oltra vez al Granada

El Nàstic gana Oltra vez al Granada

19:35  

Dimitri satisfecho con su partido y con la victoria.

El Nástic ha sido el primero en arrebatarle los seis puntos en esta temporada al Granada de José Luis Oltra. Los granates siguen bendecidos fuera de casa donde han sumado 25 puntos y serían líderes lejos de su estadio, pero en casa arrastran algún maleficio porque solamente suman 11 puntos y serían penúltimos sólo por delante del filial sevillista. Es un fenómeno paranormal que algún día tratara Cuarto Milenio de la mano de Iker Jiménez.

En el nuevo Los Cármenes el Nàstic vivió su primer triunfo en tierras nazarís. Nano buscó un once más precautorio que audaz dado los veintiocho goles a favor que los rojiblancos sumaban en su terreno aprovechando los setenta metros de ancho que tiene el terreno de juego. Los tarraconenses hicieron uno de los partidos más serios de la temporada, sin desajustes, sin despistes y sin concesiones al rival.

Defensa de cuatro en línea sin proyección ofensiva de los laterales, doble pivote eminentemente zapador, dos bandas que apostaron por la profundidad y arriba dos delanteros con la obligación de abrir espacios y jugar el balón. La apuesta salió redonda: un travesaño, un gol y tres llegadas con peligro que no encontraron quien rubricara la jugada.

El Granada con el venezolano Machís y el colombiano Ramos bien sujetos tenía que optar por los disparos lejanos pero Dimitri (el portero que más paradas lleva en la Liga con 94) ofrecía seguridad y hacía olvidar la sensación de ansiedad que la defensa granate lleva sufriendo toda la temporada. El Nàstic buscó el partido de desguace después del magnífico gol de Omar y los locales comenzaron a diluirse cuando llegaban a la frontal.

Pasaban los minutos y el Granada cada vez se encontraba más incómodo y con menos ideas, por su parte los tarraconenses mantenían la intensidad y la concentración. A falta de cinco minutos llegó el gran error del colegiado canario al sancionar con penalti un encontronazo de Jean-Luc con un delantero local. Se hizo justicia y Machis lo envió al palo (quinto penalti en contra que no sube al tanteador).  El partido entonces se hizo largo por los cinco de añadido pero los tres puntos volaron a Tarragona.

La facilidad con que juega el equipo en los desplazamientos dejando el balón al contrario y saliendo a la contra ha de saberlo interpretar en el Nou Estadi. El domingo frente a un desesperado Córdoba toca romper el maleficio.

1x1  (Puntuación del 1 al 10)

DIMITRIEVSKI  (9): Partidazo del macedonio hasta nueve veces le chutaron entre los tres palos, además hizo tres salidas muy seguras. El mejor.

KAKABADZE  (7): El georgiano ofreció su mejor cara defensiva, no se complicó y se anticipó bien. Se retuvo en las subidas.

PLEGUEZUELO (7): Rápido y decidido, fue poco exigido por arriba y en el juego a ras de césped estuvo superior a sus rivales.

ARZO (7):  Fue el jugador que puso veteranía, experiencia; enorme por arriba leyó bien las jugadas para cerrar espacios.

ABRAHAM (7): Bajó la barrera en su banda, no dejó espacios y supo aguantar cuando fue necesario. Supo ser expeditivo.

FALI  (7): Menos visible que en otros partidos, supo ejecutar la tarea de vigilancia en la zona ancha y cubrir espacios.

GAZTAÑAGA (7): Complementó el doble pivote y supo incrustarse en la línea defensiva cuando los locales apretaban. Hizo un partido práctico.

TETE (6): Dos buenas galopadas por la banda incisivas en el primer tiempo, luego ayudó más al control que no a generar jugadas.

OMAR (7): Apareció menos de lo esperado pero dio los tres puntos con un potente disparo cruzado. Va adquiriendo el estado físico adecuado.

UCHE  (6): Hubo un par de jugadas en el área que no estuvo atento, aguantó el esférico pero no creó excesivo peligro.

MANU (7): Un disparo al travesaño y un desgaste exigente ante una defensa bien puesta. Le faltó ayuda y balones bien centrados desde el lateral.

JEAN-LUC (6): Le falta la chispa que le hacía desbordar con facilidad, no encontró la fórmula para sacar partido por su banda.

ÁLVARO  (6): Recuperación milagrosa del delantero, salió para aguantar el balón y dio síntomas de estar recuperado.

MÁRQUEZ (6): Entró para poner pausa al partido.

NANO (8): Apuesta arriesgada en la alineación pero que le salió bien. Supo colocar bien las líneas cuando tocó defender el resultado. Acertó en los cambios.

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Cuando los árbitros dejaron el luto

Cuando los árbitros dejaron el luto

20:45  

La Guardia Civil atenta a lo que pasaba en la grada.

Aprovechando el mal arbitraje del pasado domingo del asturiano Areces Franco, hoy toca una de colegiados. Si partimos de la base que dirigir un partido de fútbol es tarea muy complicada nos daremos cuenta de que arbitrar es una actividad proclive a la polémica, al desatino, a la discordia y que suele acabar con improperios...pero desde hace unos lustros ya no en incalificables agresiones.

En los años treinta en Catalunya se produjeron palizas, linchamientos y persecuciones a colegiados en campos como los del Gimnàstic, Reus, Horta, Sant Andreu, Martinenc e incluso en Les Corts y Sarriá.  Coincidía la incultura del personal (el índice de analfabetización era muy alto) y también por parte de los colegiados todos procedentes del estrato social medio bajo y propensos a aceptar prebendas por alterar un resultado.

A partir de los años cuarenta aparecen los árbitros mayores, barrigones, faltos de preparación física y algunos con carencias culturales (en Tercera División visitaron la Avinguda Catalunya dos colegiados que no sabían escribir y uno de sus líneas les rellenaba el acta), esto provocaba situaciones violentas que se acrecentaban cuando se iba bajando de categoría. En la provincia de Tarragona hacer un arbitraje imparcial en Camarles, La Cava, Sant Jaume d'Enveja o la Rápita equivalía a ser un héroe o acabar en el canal. Antes con un fútbol más lento pero más tosco y sin tarjetas con facilidad el colegiado se acobardaba.

En los años sesenta y setenta los árbitros de categoría nacional subsistían con el arbitraje acompañado de profesiones tan peculiares como brigada del ejército, carnicero, representante de productos farmacéuticos, mecánico, encofrador combinados con algún médico, maestro o incluso un abogado.  Siempre vestidos de negro, siempre el centro de la polémica. A partir de 1996 la FEF decide quitar el negro luctuoso de los uniformes de los trencillas (palabra tomada de 1952 cuando los colegiados vestían una chaquetilla negra con un canesú o trencilla blanca) y darles color. Pero no fue para que dieran una imagen más alegre, fue por demanda de las televisiones porque la gama cromática seria más amplia.

Hoy en día los árbitros todos son jóvenes, de profesiones liberales, deportistas con un exigente grado de preparación física y una enorme capacidad técnica. Les aseguro que pitan libremente y sin prejuicios (me refiero a la Liga 1,2,3) y si una jornada el Nàstic como el domingo se vio perjudicado, siete días antes en el Mini salió favorecido. Mi consejo es dejarles hacer y ayudarles en su cometido.

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Oscar al peor equipo en casa

Oscar al peor equipo en casa

20:59  

Buena reaparición de Jean-Luc hasta que las fuerzas le aguantaron.

Podemos asegurar que en toda la historia moderna del Nàstic jamás como local después de catorce jornadas había sumado tan solo tres triunfos (Sevilla At, Granada y Albacete) y dos empates (Barça B y Cádiz); perder nueve partidos es merecedor del Oscar al peor equipo en casa. Y la mancilla sube un escalón al mirar los goles: once a favor y veintidós en contra. Ni Carreras, ni Rodri, ni Nano han podido enmendar el agujero negro del Nou Estadi.

Lo chocante es que exceptuando los partidos frente al Sporting, Alcorcón, Lorca, Huesca y Reus Deportivo, el equipo hizo méritos (por buenas fases de juego) a no marchar del césped de vacío. Tanto delante del Zaragoza como del Tenerife los primeros veinte minutos fueron buenos, incluso muy buenos, pero siempre el equipo acaba desvaneciéndose; se le evapora el fútbol y solamente vive a base de arreones. El problema estriba en la composición de la línea defensiva, ante los canarios se utilizaron a cuatro jugadores con prestaciones distintas: Kakabadze (muy ofensivo), Pleguezuelo (bajo, en el segundo gol le comen la tostada), Molina muy errático (en el primer gol no cierra) y Abraham (con plomo en las botas para volver). Si el rival tiene a dos depredadores implacables como Longo y Villar, pasa lo que pasó.

Tampoco se leyó demasiado bien el partido cuando se iba contra corriente, el centro del campo estaba roto con Fali queriendo asumir un papel que no le correspondía, con un Tejera impreciso y con Maikel que nunca encontró la comodidad sobre el verde. Arriba se fueron generando ocasiones y se finalizaron jugadas pero se toparon con un acertado Dani Hernández bajo palos y un desacertado Areces Franco como juez del partido. El Nàstic hizo lo más difícil crear y chutar, y erró en lo más fácil contundencia y rigor en la destrucción.

El aficionado se harta, se desespera y ya tiembla pensando que nos acercamos al escenario final de la pasada temporada, frente al Tenerife con 4.723 espectadores se registró la peor entrada del presente curso. Algo falla cuando los partidos en el Nou Estadi son un calco: se sale enchufado y con dinamismo, las ideas se diluyen y en la segunda parte pesan las piernas y las neuronas bloquean el cerebro. Además el grado de intensidad de algunos jugadores debería de aumentar algunos grados.

Y el sábado habrá que tener los ojos muy abiertos en Los Carmenes para que no pase como el adagio popular que dice, dale limosna mujer, que no hay en la vida nada como la pena de ser ciego en Granada'.

1x1  (Puntuación del 1 al 10)

DIMITRIEVSKI (7): Tres buenas intervenciones; en el primer gol se ve sorprendido por el tiro cruzado de Villar, en el segundo quizás pudo impedir el remate del delantero.

KAKABADZE (6): Inició la jugada del gol, tiró tres veces a puerta pero en defensa pasó algunos apuros.

PLEGUEZUELO (4): Culpable del segundo gol, tuvo desajustes que propiciaron ocasiones de gol, poco afortunado en el juego en largo.

MOLINA (4): Fallo en el primer gol, impreciso en las combinaciones; no da sensación de seguridad.

ABRAHAM (3): Superado en velocidad y poco efectivo en sus galopadas por la banda. Se buscó una tarjeta amarilla que le condicionó.

FALI (6): En el primer tiempo estuvo atento en el corte y robó balones, luego se precipitó e intentó jugar en largo sin precisión.

TEJERA (5): Fue menguando con el paso de los minutos; en el segundo tiempo perdió balones y midió mal los pases.

MAIKEL (6): Una asistencia de gol y un par de disparos con intención. Ha perdido la frescura de las primeras jornadas y no encuentra su sitio.

JEAN-LUC (7): Un puñal por la banda hasta que le quedó gasolina; supo crear peligro y buscó al compañero. No estaba para noventa minutos.

TETE (6): Un gol de listo pero poco más. Es demasiado individualista y retiene en exceso el balón. No buscó las diagonales.

MANU (6): Le anularon un gol por un muy justo fuera de juego, como siempre descolgó balones pero para nadie porque estuvo huérfano de ayuda.

UCHE (4): Estuvo pero no se le vio. No supo entrar en un partido que estaba roto. Le faltó tomar protagonismo con el balón.

MUÑIZ (3). Ahora ya ni a balón parado; el asturiano tuvo poca participación y no tomó riesgos con el marcador en contra.

DONGOU (2): Creo que en los minutos que lleva jugados no ha llegado a tocar más de tres balones, ayer ni lo olió y se estorbó con Uche.

NANO (5): Planteó bien el partido (no es responsable de los fallos puntuales de sus jugadores), pero no acertó en la convocatoria y sinceramente creo que pudo hacer otros movimientos en los cambios. Urge que solucione el problema defensivo.

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