Compreme usted este partido...

Compreme usted este partido...

1:22  

Imagen del Constància-Nàstic.

En los años sesenta apareció un individuo en la Tercera División catalana que se ofrecía a los presidentes para amañar encuentros. Llamaba a un club y les proponía comprar un partido: el empate tenía un precio y el triunfo otro, él siempre se llevaba una comisión por las gestiones. Los lunes volvía a ponerse en contacto con el Club beneficiado y cobraba (1.000 pesetas si la gestión fallaba, 3.000 pesetas si se producía un empate y 5.000 si había victoria) a estas cantidades había que añadir las que supuestamente cobraba el colegiado. El tipo pululó por los despachos durante varias temporadas hasta que se descubrió el truco: jamás contactaba con los árbitros (que según él eran los artífices del amaño). La suerte, como en una quiniela, era la que le propiciaba las ganancias porque el empate o el triunfo era producto siempre del esfuerzo del equipo. El Nàstic picó el anzuelo en seis o siete encuentros y se gastó unas 80.000 pesetas de la época.

A comienzo de los años setenta hubo una purga de árbitros de Primera y Segunda (pueden tirar de hemeroteca para corroborarlo) a mitad de temporada por que aquella Liga se convirtió en un mercado persa, hoy creer que los colegiados pueden avenirse a amaños con el control que existe es una verdadera falacia. Me contó un colegiado que en los años sesenta cuando se quería arreglar un partido nunca se pitaban penaltis a favor, el trabajo era más sibilino...se machacaba al equipo con faltas en el centro del campo hasta que por desgaste cedía.

Arreglar resultados hasta los años noventa era una práctica habitual cuando se entraba en la recta final de la competición. Me consta que muchos equipos (entre ellos el Nàstic) arreglaron partidos; hubo un Hércules-Nàstic, Europa-Nàstic y un Nàstic Cádiz en los setenta con maletines. Posteriormente otros encuentros también tuvieron fundadas sospechas de convenios colectivos. A lo largo de la historia han existido nombres de jugadores vinculados con actuaciones sospechosas: Dauder, Taltavull, Llorenç Rifé...

Pero pretender que en pleno siglo XXI  se pueden amañar resultados como el Constáncia-Nàstic para perjudicar a alguna casa de apuestas me parece una acusación banal que no se sustenta. ¿Van a conchabarse los veintidós jugadores para llegar a un empate?, ¿se puede comprar a un jugador (Onteniente) cinco jornadas antes de jugar el encuentro?, ¿tan fácil es pagar a un jugador para que cometa un penalti o falle un gol, sabiendo que puede ser condenado por la justicia ordinaria?...Perdonen, pero no me lo creo.

Para acusar de un delito tan grave (si seguimos por este camino acabaremos con el fútbol) hacen falta pruebas. Si Ricardo Resta (que en Tarragona hizo honor a su apellido) está tan seguro...pues que llame al equipo de CSI, Miami, Las Vegas o New York, para que pongan luz sobre el asunto. Mientras que dejen en paz a los equipos modestos.

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La Sombra del Viento

La Sombra del Viento

20:53  

Mientras se permita jugar en campos como éste la Segunda B será una liga de chichinabo.

Me lo parece a mí o en el entorno del Nàstic sopla viento en contra, un viento que siluetea la sombra de la RFEF, un viento que no era precisamente un Huracán. Mucha casualidad que el equipo reciba penaltis en contra tan discutibles como los señalados frente al Olímpic, Olot o esta tarde en Manises, que se le anulen goles o expulsen jugadores. Llegó la hora de descolgar el teléfono rojo y hablar con Jorge Pérez, el eterno secretario de la Federación y pedir explicaciones. El Nàstic desde la llegada de Vicente Moreno ha entrado en una nueva dinámica, la del empate, que a partir de la mañana de Reyes en Lleida debería reafirmarse en triunfos.

El equipo ha ganado en solidez, en recursos, tiene mayor presencia en el centro del campo y ha logrado formar un once titular más sólido. El equipo valenciano que carece de raíces históricas pues fue concebido a golpe de talonario en el 2009, solo había concedido tres empates en los encuentros en su Polideportivo Municipal, por tanto un empate (gol de penalti en contra y dos tantos anulados) puede darse por bueno. Me alegro del primer gol como granate de Xisco Campos, uno de los jugadores con más identificación con estos colores.

El Nàstic cierra el primer capítulo de la Liga con 27 puntos (si el play of puede estar sobre los 66 puntos) debería sumar 12 puntos más en la segunda vuelta, que no significa ninguna proeza y está a su alcance. Durante el actual curso el club ha vivido demasiadas acciones externas no deportivas que han diluido la esencia fundamental: centrarse en la Liga. Más visitas a los juzgados que todos los colaboradores de Sálvame juntos; desajustes con Hacienda que deberá de pagar (el Nàstic no es la Infanta); pendientes de una Copa del Rey con trampa (lo del doble partido con un Primera es jugar con las cartas marcadas) y encima la acusación de amaño de partidos (en Segunda B, que me perdonen las casas de apuestas, es querer comparar las ganancias de un Casino con las de un Bingo); jugadores que están, cobran pero no hacen nada (como algunos senadores); un cambio de entrenador precipitado (es el peaje a pagar por depender de una empresa que busca resultados a la corta) y los ardides de algunos clubes dispuestos a cobrar ventaja antes del partido (Sant Andreu jugando en un campo impropio teniendo el suyo a punto, en Elx jugando en el de entrenamiento un miércoles a las 4 de la tarde o frente al Huracán con menos de 48 horas de descanso).  Y para más inri 17 postes en 19 jornadas y dos penaltis fallados.

Solamente que en la segunda vuelta se vuelva a un clima de normalidad y que la suerte se comporte como no lo ha hecho en la primera vuelta, el Nàstic llegará a tiempo de jugar la fase de ascenso. Feliz Navidad a todos. En la próxima entrada al blog, aprovechando el parón liguero, les contaré el tema de las compras y ventas en el fútbol que he visto que cada vez resultan más imposibles de ejecutar.

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Ganar en tiempos revueltos

Ganar en tiempos revueltos

16:59  

Javi (provocó el peanlty) y Lago (lo transformó)

Son momentos complicados para estar centrado en la Liga, corren tiempos revueltos, que si la denuncia por amaño de partidos por parte de la casa de apuestas (que por mi larga experiencia, no me lo creo), expulsiones de jugadores (a uno por encuentro), la ilusión del partido de Mestalla, la infructuosa persecución de los pasajes para acceder al play off que no llegan, pero llegarán, por eso ganar a pesar de jugar mal da un plus de satisfacción mucho mayor que si hubieses bordado el fútbol. Ocurre como con el alumno que se presenta a un examen sin haber estudiado la materia...y aprueba.

El Nàstic jugó un mal partido porque el Villarreal con un planteamiento que rozó la perfección se lo impidió, los castellonenses a parte de presionar desde la línea de arriba todo el partido nunca perdieron la compostura táctica, hecho que dice mucho en favor del técnico Lluis Planagumá. La sala de máquinas granate conducida por los Davids se quedó huérfana de recursos muy pronto y unido a la poca profundidad de los laterales, la nula aportación de Jean-Luc y la falta de entendimiento de la dupla atacante Perera-Lago, propició que el partido no compartiera el esplendor de la mañana pre-invernal. El Plan B, juego directo notó la ausencia de Marcos (a pesar de que el gol vino por una asistencia del meta Reina) y en la grada anidó la preocupación por las contras rápidas, pero un tanto romas, del filial amarillo. Además en algunas fases del partido los veinte jugadores utilizaban una cuarta parte del terreno de juego (y luego nos quejamos de las dimensiones de los campos del Llagostera, El Prat o el Huracán).

El partido necesitaba pausa que el Nàstic no supo poner, el partido necesitaba control en el centro del campo que no llegaba, el partido necesitaba oficio que si se supo poner, y al final la fortuna se vistió de grana, pero nadie puede discutir el triunfo de un equipo que a pesar de jugar mal tuvo más ocasiones que su rival. Así, por desgracia, es el fútbol que se practica en la Segunda B. El camino a seguir parece claro, aunque la RFEF permita que los impresentables dirigentes del Huracán programen su partido frente al Nàstic a menos de 48 horas del encuentro de Copa, eso solamente ocurre con equipos (no clubes) sin historial ni señorío, hechos para el regocijo, en el caso del conjunto de Manises, de  un grupo de presuntuosos empresarios ávidos de protagonismo.

La anécdota del partido. Por primera vez en los 100 años de historia de la sección de Fútbol la labor de Delegado de Equipo pasó de padre a hijo, y al estar sancionado Josep María Grau, senior, fue su hijo Josep María Grau Aleu quien actuó, siendo además el Delegado más joven en la historia del Gimnàstic en ejercer dicha función, enhorabuena.

LOS PROTAGONISTAS  (Puntuación sobre 10)

REINA (7): Estuvo bien, mejoró en las salidas y dio la asistencia del primer gol.

JUANJO (4): Muy espeso, estático en defensa abusó de avances demasiado individualistas.

VERDU (4):  Poco pródigo en ataque, se embarulló más de la cuenta.

XISCO (8): Impecable. Un valladar, anticipación y contundencia, providencial en dos acciones.

MOLINA (6): Cumplió en una demarcación que conoce pero para la que no fue fichado.

D.SANCHEZ (5): No encontró el sitio, se complicó peligrosamente en un par de situaciones.

ROCHA (6): No pudo generar su fútbol pero por lo menos intentó el disparo a puerta.

JEAN-LUC (3): Desaparecido en combate tal vez físicamente no estuviera para jugar.

PERERA (4): Corrió sin demasiado sentido, sigue en crisis rematadora. Pocas ideas.

LAGO (5): Hizo cositas pero sin acabarlas, se le vio saturado. Marcó el penalti.

GINER (8): Un ciclón, poderío, fuerza y verticalidad, estuvo poco asistido arriba.

JAVI (7); Está casi al cien por cien, imprimió velocidad y provocó el penalti.

QUEROL (6): Abrió la lata de los goles, pero su frivolidad en la celebración pudo resultar fatal.

RUBIO (6): Es un jugador que pueda aportar calidad y temple en el centro del campo.

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La tormenta perfecta

La tormenta perfecta

20:49  

David Sánchez sacó sobre el césped su fútbol tan bien Guardado.

Me permito la licencia de tomar prestado el título de la película La Tormenta Perfecta  protagonizada por George Clooney estrenada en el año 2.000, porque se parece al sistema que perfiló Vicente Moreno para que el Valencia zozobrara. El Nàstic descargó todo su oleaje en el centro del campo, las bandas fueron dos persistentes rayos y los truenos llegaron por el centro, el algún momento aquello parecía un tsunami, y es que lo imposible parecía hacerse realidad, solamente faltó que un relámpago impactara en la portería de Alves en lugar de dar en el pararrayos del travesaño. La frágil embarcación valencianista fue a la deriva y solamente encontró puerto en el pitido de Teixeira Vitienes, que por cierto realizó un arbitraje impecable; con decir que los centrales Ricardo Costa y Mathieu fueron los mejores de su equipo está todo dicho.

Desde hace algunas semanas el Nàstic ha logrado imprimir mayor intensidad a su juego y ha conseguido jugar con más inteligencia cuando no dispone del balón. Los granates tutearon el equipo de Primera y le apretaron tanto que en los últimos minutos perdían tiempo porque firmaban el empate sin goles, además los de Djuric vieron 6 amarillas y una roja, casi nada. El once tarraconense ya comienza a jugar como un bloque granítico (cuando se deja las gilipolleces en el vestuario), tiene paciencia para elaborar las jugadas, abre el campo para facilitar el juego por las bandas y dispone de un descaro ofensivo. Verdad que los equipos de Segunda B (excepto los filiales) practican un fútbol más tosco, más brusco y más adocenado y abrir los partidos supone más esfuerzo que Rajoy no lea los discursos. 

El partido fue uno de los mejores que se han vivido las últimas temporadas en el Nou Estadi, tal vea el gol hubiese hecho justicia a los merecimientos de unos y otros.  De seis partidos oficiales que ha jugado el Valencia frente al Nàstic en Tarragona, perdió cuatro y empató dos. ¿De que ha de servir el buen encuentro realizado?. De que el equipo aumente su autoestima, crea en sus posibilidades y siga por el buen camino táctico, para los aficionados debe servir para ahuyentar los malos espíritus y las dudas. Ahora toca el domingo refrendarlo frente al Villarreal B.

LOS PROTAGONISTAS  (puntuación sobre 10)

TOMEU (9): Espléndido con tres manos salvadoras y buen juego con el pie.

JUANJO (9): Está en un gran momento, no sabría decir si ataca mejor que defiende o al revés.

XISCO (7): Resolutivo y contundente. Algún problema para marcar al gigante Mathieu.

MARI (7): No tuvo dudas, intentó jugar desde atrás. En fase de mejora.

VERDU (7): Se desdobló con eficacia, muy atento a pesar de un par de despistes.

D.SANCHEZ (9): Excepcional hasta que se quedó sin gasolina. Da gusto verle jugar.

ROCHA (8): Puso el cerebro al servicio del equipo y oxigenó el juego. Acabó fundido.

JEAN-LUC (7): Buenos detalles, pero a veces pierde la posición en el campo con facilidad.

MARCOS (6): Trabajó, peleó, pero está divorciado con el gol. Lástima.

LAGO (8): Llevó de cráneo a la defensa che, alguna de las ocasiones no la debió marrar.

GINER (8): Rápido, vertical y eficaz, debe mejorar los fundamentos defensivos.

JAVI (6): Necesita minutos para reencontrarse como futbolista. Paciencia.

QUEROL (6): Entró con el partido trabado y no pudo activar su fútbol imprevisible.

MOLINA (7): Pocos minutos pero estuvo en todas. Supo taponar el juego valenciano.

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¡EL PUPAS¡

¡EL PUPAS¡

18:24  

El Atlético de Madrid ya puede traspasarnos el título de 'El Pupas', en lo que llevamos de temporada hemos hecho méritos más que suficientes para ostentarlo. En 17 jornadas llevamos 4 penaltis en contra, 2 penas máximas falladas, 5 expulsiones, 15 balones estrellados entre postes y largueros, y dos rojas por gilipolleces (la de Juanjo digna  de un jugador cadete, y acumular dos amarillas el central Mari en cinco minutos es de récord Guines), y para más inri frente al Sant Andreu nos obligaron a jugar en un campo indecente...

Además el Nàstic se ha convertido en el equipo ONG del grupo regalando puntos a Onteniente, Constáncia, Olímpic y Olot...si con todo estos obstáculos estamos a solamente cinco puntos del play of hay que creer que se puede lograr el objetivo. Además el Ilicitano tan solo había cedido dos empates en casa jugando contra once, por tanto el punto tiene un enorme valor moral aunque en la clasificación sea un simple empate.

La liga es el torneo de la regularidad y al acabar la temporada normalmente la balanza de la suerte y la desgracia se equilibra, por lo tanto el futuro se presenta halagüeño. De todas formas aprovecho para hacer una reflexión: le interesa a la RFEF la Segunda B, por que mandan huevos colocar un partido a las cuatro de la tarde de un miércoles destinado exclusivamente a parados y jubilados, claro que con el nivel de paro que existe en España se podía haber llenado el campo Diez Iborra.

Ahora a esperar el domingo la visita del Valencia para poder disfrutar de una tarde copera.

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¡Tonterías las justas¡

¡Tonterías las justas¡

20:45  

Las tonterías se pagan caras en el fútbol, pero las gilipolleces salen a precio de caviar iraní. El reglamento en todos los deportes está para cumplirse pero siempre existe la interpretación de los jueces (árbitros) como sucede en la justicia ordinaria. El colegiado navarro durante todo el encuentro realizó una interpretación muy particular de las Reglas de juego, parecía el juez que ha desimputado a la Infanta  (aplicó mal la ley de la ventaja, estorbó a los jugadores sobre el césped, se excedió en la primera cartulina en el minuto 1 a Xisco y luego se erigió en protagonista al expulsar al delegado Josep María Grau y alargar en casi diez minutos el segundo tiempo) . La jugada del penalti no la vi con claridad en el campo, posiblemente fuera...pero ¿la hubiese pitado en Llagostera, El Prat o en el campo del Xàtiva?. La gilipollez de Juanjo resultó más grave porque pudo tener consecuencias graves para su equipo, fue una acción absurda, innecesaria y un tanto surrealista. Un jugador de su experiencia no puede caer en la trampa en un partido que hasta el momento había sido tranquilo.

El Nàstic jugó un primer tiempo primoroso (de lo mejor de los últimos años) pero con el defecto de siempre: falta de acierto, el Llevant podía haberse ido al descanso con un 3-0 con toda justicia. Si algún pero se le puede poner al Nàstic fue la excesiva conducción individual de balón de Giner, Verdú, Tortosa o Rocha. La apuesta de Moreno por un fútbol descarado, abierto y paciente a la espera que el contrario pierda la posición me parece muy inteligente. El filial granota  no existió , se limitó a presionar y juntar líneas, ni siquiera pudo montar una contra decente. 

Tras el descanso el Nàstic fue perdiendo el control de partido pero tuvo en las botas de Querol la sentencia. A raíz de la polémica jugada del penalti, el sistema sed deshinchó, volvió la ansiedad a apoderarse del Nou Estadi, el miedo, que digo miedo, el terror a dejar escapar otra victoria planeó como la gaviota del Partido Popular que ha echado el cerrojo a Canal 9. Hubiese vuelto a ser injusto perder dos puntos porque los méritos fueron todos granates. El equipo ha ganado en intensidad, en colocación y sobre todo ha recuperado el juego por las bandas. Buenas sensaciones dejó el equipo que ahora deberá corroborar el miércoles ante el Ilicitano...

LOS PROTAGONISTAS (Puntuación del 1 al 10)

REINA (5): Poco trabajo, sólo fue agobiado en los minutos finales en que se tragó algún centro.

JUANJO (3): Excelente labor ofensiva por su carril, la gilipollez le pone la nota en suspenso.

XISCO (6): Contundente atrás supo poner orden, regaló algunos balones largos.

MARI  (7): Mejoró. Serio en la zaga no dio concesiones y marcó un gran gol importantísimo.

VERDU (6): Se atracó de balón en algunas subidas, dio buenos centros y cortó en su zona.

D.SANCHEZ (8): Primer tiempo para enmarcar, tiene más ritmo y vio muy bien el juego.

ROCHA (7): Trabajo más oscuro, buscó poco las diagonales, al final desapareció.

TORTOSA (6): Hizo de zapador ayudando en el medio campo hasta que se fundió.

LAGO (7): En su buena línea, participó en los dos goles y buscó bien el uno contra uno.

PERERA (6): Volvió a marcar, pero perdonó un gol imperdonable de fallar.

GINER (8): El Pequeño Bale del Nàstic: rápido, incisivo, constante y con buen disparo.

QUEROL (5): Precipitado, salió muy alocado cuando el partido necesitaba pausa.

JAVI M.  (5): Entró en pleno marrón. Lo importante su vuelta al equipo.

MOLINA (-): Sin tiempo.

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