...Y un islandés, por qué no.
Temporada 1986/87. Enric; Cunillera, Parejo, Eloy, Santi, Vadell; Imaz, Parés, Garriga, Bañeras y Ramón. (Aquí dos jugadores de fuera Eloy e Imaz9
Vaya por delante que esta entrada en el blog no tiene intención de generar polémica, pero si quiere ser un toque de atención sobre el modelo de fútbol al que estamos abocados. La vida es pura evolución, pero a veces el progreso no puede avivar la pérdida de los valores. El fútbol nació como un juego que pronto se convirtió en deporte para transformarse en un espectáculo que ha acabado siendo un negocio. Quienes me siguen ya conocen mi apuesta romántica por el deporte, mi debilidad por los futbolistas capaces de anteponer el corazón al cerebro. Ya sé que voy contracorriente...pero la pasión le puede a la razón.
El cambio de cromos que cada vez más realizan los clubes se ha convertido en una frivolidad que los aficionados admiten con cierto estoicismo pero sin convencimiento. El Nàstic de momento ha tirado lastre por la borda (años) para aligerar la embarcación. Es lógico que desde la dirección técnica no se mire el pasaporte del jugador y si en cambio que la toque, que marque goles o que los evite (caso de ser defensa); pero la plantilla se ha transformado en un año en un Foro de las Naciones (Cameruneses, 3; Georgianos, 2; y un Japonés, un Marfileño, un Gabonés, un Marroquí, un Croata, un Francés, y medio apalabrado un chileno)...y un Islandés, por qué no.
Tanto cambio en un equipo provoca convulsiones, distanciamiento y a veces desconcierto entre los aficionados especialmente entre aquellos que ya peinamos canas. Me cuesta entender que el Nàstic (como otros equipos) se haya convertido en una especie de escala para jóvenes jugadores que quieren aterrizar en el mercado de las ligas mayores. Tal vez estemos entrando en una nueva cultura del fútbol en la que solamente podrán sobrevivir aquellos clubes que puedan cotizar en el mercado bursátil balompédico.
Añoro cuando tuve la oportunidad de trasmitir el último partido en que el Nàstic utilizó únicamente jugadores de casa, fue un 30 de noviembre de 1986 en el campo del Vic (1-1), Campeonato de Tercera, Enric Coch; Parejo, Santi Coch, Botella, Cunillera, Parés, Antonio Domínguez, Garriga, Javier Ramis (Cano m.87), Bañeras y Roberto (Ramón Coch, m.85). Fernando García Ramos fue el técnico.
Ahora en ésta temporada tal vez en un partido podamos ver ésta alineación: Ondoa, Kakabadze, Suzuki, Djetei, Zahibo, Madinda, Aburjania, Jean-Luc, Stephan Emaná, Mharsalla y Maloku. Ay¡ si nuestros abuelos levantaran la cabeza.
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