CRE-DI-BI-LI-DAD
Vicente Moreno ofrece todas las garantías.
La pretemporada que acaba de cerrar el Nàstic ha estado marcada por las dudas, las sorpresas en forma de salidas de jugadores, la tibieza entre buena parte de la afición que no acaba de arrancar y la desgracia en forma de lesiones graves, los Manolos (Reina y Martínez). A falta de una semana para que suba el telón de la Liga 1,2,3, podemos afirmar que la fortuna ha sido esquiva con el conjunto tarraconense...ha habido mala pata.
Con la casi segura marcha de Ondoa al Sevilla At. ahora la dirección deportiva tendrá que fichar a dos guardametas porque el peroné de Manolo Reina invita al pesimismo. A la plantilla tal vez la hayan faltado un par de semanas para ir cerrando los sistemas y encontrar la manera de generar más ocasiones de gol. La situación no invitaría al optimismo si no echáramos mano de la estadística.
Desde que en noviembre del 2013 llegó Vicente Moreno al banquillo del Nàstic, el equipo ha demostrado coherencia táctica, enorme capacidad de esfuerzo sobre el césped, buen trabajo de estrategia y el descubrimiento de jóvenes talentos que han fortalecido al conjunto. Por tanto hay que tener confianza infinita en el técnico valenciano. En los partidos vistos el equipo se mantiene sólido en defensa, mejorable en la elaboración, pero con una capacidad infinita de presionar al rival y robar balones. Por eso CRE-DI-BI-LI-DAD absoluta para Vicente Moreno y paciencia a los aficionados porque repetir la proeza del año pasado resultará un reto muy, muy difícil.
A esperar al portero que en pocas horas firmará por el Nàstic y que debutará el domingo frente al Lugo y a apoyar al equipo. La Segunda División cada temporada, y no es ningún tópico, está más igualada y difícil. Repito CRE-DI-BI-LI-DAD, a pesar de las dudas, al proyecto que está semana se pone de largo.
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