Todos para uno, uno para todos
Queremos repetir aquella experiencia única.
No creo que el bueno de Alejandro Dumas me pida derechos de autor por utilizar la mítica frase contenida en su novela Los Tres mosqueteros, aunque a mi me divirtió más el Conde de Montecristo que por cierto los habanos que suelo fumar llevan el nombre del aventurero creado por la imaginación del escritor francés. ¡Todos para uno, uno para todos¡, bastaría con esta frase situándola el domingo 11 de mayo a partir de las seis de la tarde para no tener que escribir más, pero me resulta obligado compartir algunas reflexiones.
Miente como un bellaco o como un exdirector deportivo, quien presuma ahora de que siempre creyó en que el Nàstic se engancharía al play-off; creo que ni el presidente Josep María Andreu (en buena parte artífice del milagro) pensaría que ésta temporada aún podríamos sacarle rendimiento. La ciudad ha vuelto a engancharse con el Nàstic, muchos ciudadanos que desertaron de las filas granas han vuelto con la ilusión expresada en sus ojos como sucediera hace ocho temporadas, lo del domingo para recibir al Huracán será un tsunami rojo. Nadie, absolutamente nadie puede quedarse en casa, los grandes acontecimientos hay que vivirlos, sentirlos, emocionarse, ser partícipes...No hay excusa, ni precio (más barato que una cerveza en una terraza de la Rambla), ni pereza (¡levantar el culo del sofá, coño¡), ni abstraerse con el penúltimo capítulo de la Liga de Primera (que la gana el Cholo o si no les corta las pelotas a toda la plantilla). El domingo, todos al fútbol¡
Ha sido un año muy complicado, sembrado de minas que los enemigos granas les iban quitando la espoleta para que estallaran, pero el proyecto (más de una vez criticado desde esta columna lo reconozco y lo asumo) se ha consolidado, se han engarzado bien las directrices de trabajo del Consejo de la SAD con las de PROMOESPORT, se ha logrado una excelente sintonía entre el equipo técnico Vicente Moreno y Adolfo Baines, con el Secretario Técnico Emilio Viqueira y con los colaboradores Santi Coch y Santi Palanca. La plantilla después de la desinfección del vestuario y entorno se ha convertido en una roca de granito y se ha logrado tener un equipo base a pesar de que nos quitaran de la cartera tres puntos y las bajas de Tomeu (injustamente apartado) más los lesionados Jean-Luc, Javi Martínez (cuánto te añoramos), Giner (sin las galopadas del pequeño Bale) y Perera (nos dejó huérfanos de gol).
La historia, y lo digo por experiencia, se escribe en el momento, es instantánea como el Cola-Cao, pero se valora y se magnifica con la perspectiva del tiempo e incluso puede llegar a convertirse en epopeya o leyenda. Lo ocurrido esta temporada ya les digo que será un capítulo tan difícil de creer como la existencia de Batman, Superman o Spiderman. Si en Madrid buscan la Décima, en Tarragona la lograremos el domingo, la Décima victoria consecutiva.
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