miércoles, 12 de julio de 2017



   En el fútbol actual pretender que un jugador de categoría nacional logre alcanzar los 528 partidos oficiales como hiciera el grana Santiago Coch es más utópico que el ensayo de Tomás Moro. Lo que ahora se lleva es la trashumancia furtbolística en la que no se deja reposar al jugador en los equipos y se le trata como un vino de tetrabrick, en vez de dejarlo envejecer para que gane en solera.  La gran noria de los fichajes este verano se mueve con la fuerza eólica de la especulación con el único fin de producir negocio. 

     El mercado de la Liga 1,2,3 se ha vuelto loco, ha provocado un tsunami de unas dimensiones que darían para una secuela de Lo imposible. Pero curiosamente el movimiento de traslación ha sido únicamente en horizontal, casi nunca en vertical, es decir los cambios de cromos se producen en su gran mayoría entre equipos de la misma división. Hasta el día de hoy 13 de julio los 21 equipos de la Liga 1,2,3 (no contamos al Lorca porque desconocemos sus datos) han producido 240 bajas de un total de 540 fichas con las que se inició la pasada temporada. Al cerrar el mercado será posible que hayan cambiado un cincuenta por ciento de los jugadores.

    Los equipos con la puerta de salida más ancha han sido: Granada (22), Alcorcón y Zaragoza (18), Almeria (16) y Gimnàstic (14), con la puerta más estrecha Sevilla Atletico (2), Albacete (3) y Huesca (6). El mercado cierra el 31 de agosto. Ah¡ y de los 22 entrenadores solamente cinco iniciaron con su equipo la temporada 2016/2017.

   Esa vorágine a la hora de fichar sirve para mover el cash de los clubes y sobre todo dar de comer a las empresas de representación de jugadores pero desconcierta a los seguidores de los equipos que han de volver a memorizar en que equipo juega ahora tal jugador. Ya nos hemos acostumbrado a los cambios de indumentaria sin venir a cuento, las botas de colorines (la pasada temporada en un partido en el Nou Estadi de los 22 jugadores solamente uno calzaba botas negras), a los ocho horarios diferentes en que puede jugar tu equipo y en los cambios de look de los futbolistas durante la temporada y que cuesta reconocerles, pero al vértigo de las mutaciones de la plantilla cuesta.

   Entrar  al salón de lo bicentenarios del Nàstic será tarea titánica, de hecho solamente Xavi Molina con 145 oficiales puede aspirar a entrar en un par de temporadas. Hoy acaba de comenzar la temporada 2017/2018 y se presenta movida al menos en la Segunda División.

PD.- Desde este blog reivindico en que los jugadores de Segunda División puedan llevar la camiseta personalizada.
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