domingo, 29 de abril de 2018

El Nástic siempre fue a remolque del Lorca

En el mundo del fútbol los tópicos proliferan. Algunos entrenadores para explicar el grado de profesionalidad de sus jugadores suelen utilizar ciertos vocablos: motivación, vergüenza, implicación, entrega o lucha; pues bien ayer en el Rico Artés (salvo alguna rara excepción) los jugadores del Nàstic no las pusieron en práctica por omisión, dejadez o por pura vagancia. Si el Nàstic fuese una empresa normal y no se rigiese por las leyes laborales del fútbol, podría hacer hoy mismo una regulación de empleo para despedir por lo menos a la mitad de los trabajadores que tuvieron rol en el partido frente al Lorca.

En tierras murcianas no es que se jugara mal, es que no se jugó a nada ante un rival de Segunda B y cuya única motivación era salvar la papeleta y ganarse algunos euros extras. El Nàstic no estuvo ante la pasividad de Nano que fue incapaz de ponerle rumbo al encuentro, un Nàstic donde sus futbolistas (excepto  Dimitri, Kakabadze, Fali y Álvaro) dieron muestras de una tibieza alucinante ante la importancia de los tres puntos en litigio. Los granas nunca fueron capaces de marcar el ritmo del partido y el Lorca jugó cómodo y sobre todo muy tranquilo.

Volvió a sorprender la titularidad de Muñiz y Tete, tampoco se entendió que la línea defensiva no jugase más adelantada para generar dudas en el rival. El Nàstic volvió a ser un equipo horizontal, previsible, lento de movimientos y huérfano de imaginación. Y en una jornada en que los guarismos soplaron a favor, va el equipo y naufraga en Lorca. Dos de los peores partidos de la temporada precisamente han sido contra el equipo lorquino (0-2 y 1-0), el de ayer con la urgencia de sumar. La afición del Nàstic no se merece esta actitud del equipo, se puede jugar mejor o peor, pero la sensación de negligencia del cuadro grana ayer resulta incomprensible e imperdonable. Creo que deberían de pedir perdón a los aficionados granas por la vergüenza que pasaron ante el televisor.

Retornaron las grietas e inseguridades defensivas; la nula elaboración de fútbol, la ausencia de verdaderos extremos y la falta de picante arriba. Un balance de tres llegadas con cierto peligro, las mismas que los locales resulta un bagaje insuficiente para hollar un triunfo lejos del Nou Estadi. Ah¡ y la tangana final resultó deplorable, vergonzosa y que le privó al Nástic de unos últimos cuatro minutos.

Ahora el partido matinal del domingo frente a Osasuna se convierte en una necesidad de victoria para mantener la distancia con la línea que marca el precipicio que conduce al infierno de la Segunda B. 

1x1 (Puntuación del a al 10)

DIMITRI (7): En el gol despejó pero luego el delantero remató solo. Dos buenas manos que evitaron males mayores.
KAKABADZE (5): Sufrió mucho en defensa por la falta de ayudas, en ataque se lanzó tres veces pero sin hallar colaboración.
MOLINA (3): Muy desajustado, en el segundo remate del gol llega tarde. Impreciso en los pases, volvió a rifar balones.
ARZO (4): Falla en el gol al no cubrir bien a su marcador. Luego estuvo espeso y perdió la colocación.
MINERO (3): Si en ataque estuvo regular en defensa lo hizo mal, casi siempre se le anticipó el rival y perdió varios balones. Le faltó actitud.
TEJERA (2): Desaparecido, no se le vió sobre el césped. Lleva partidos pidiendo descanso. Eso si, participó en todas las batallitas que hubo
FALI (6): De los pocos que no giró la cara y peleó todos los minutos. Seguro que con once falis el partido no se pierde.
MUÑIZ (2): Otro partido malo del asturiano, sólo el lanzamiento de una falta. Perdió balones, entregó mal y le faltó actitud. Pero sigue de titular, un enigma.
TETE (2): Indolente, desperdició una clara ocasión, se empeñó en driblar y perder el balón y sigue sin entenderse su continuada titularidad.
MAIKEL (3): Mal, dispuso de un par de acciones pero pronto se diluyó en zona de nadie y estuvo desaparecido.
ALVARO (5): Otro partido que tuvo alguna ocasión pero la desperdició, por lo menos estuvo activo y luchó hasta el final.
MANU  (5): Con actitud dispuso de un par de oportunidades contó con poca colaboración. Debió entrar antes.
OMAR (4): Los pocos minutos que estuvo en el césped los desaprovechó, debió buscar más el balón por la banda.
MARQUEZ (-): Sin tiempo.


NANO (3): Debió ir desde el minuto uno a por el partido. Erró en mantener a Muñiz y Tete, y en los cambio como suele sucederle, mal en tiempo y en el sustituido.

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1 comentarios :

Enric has encertat com sempre, l’indolencia dels jugadors i la poca sapiència de cambiar la dinàmica de joc , ha donat el resultat que hem vist
VERGONYÓS

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