Bernabé: fin de ciclo
El domingo 21 de junio de 1964, a punto de cumplir los diez años, estaba en casa de unos amigos de mis padres para ver la Final de la Eurocopa que se disputaba en el Santiago Bernabéu entre las selecciones de España y la Union Soviética. Nosotros aun tardaríamos unos meses en disponer de un aparato de televisor que nos alegraría la monotonía de las tardes y noches invernales.
A mi el futbol me gustaba y de la mano de mi padre era un asiduo a la Avinguda Catalunya para ver al Nàstic. En aquella final que ganó la selección española a la rusa por 2-1, el triunfo entraria en connotaciones políticas que los pequeños y muchos mayores ignorábamos. Frente al aparato de televisión ante mis ojos emergieron dos gigantes vestidos de negro y que volaban como los superhéroes. Estaba extasiado viendo a dos de los grandes porteros de todos los tiempos frente a frente, Jose Angel Iribar, el Chopo, y Lev Yashin, la Araña Negra.
Desde entonces cada partido en el campo del Nàstic solia fijar mi atención en los cancerberos, los visitantes los veías de forma puntual pero con los granas convivías cada quince días. Recuerdo la seguridad de Vilanova; la perseverancia de Ramon Palau; la agilidad de Manu Zamora; la personalidad de Vicente Amigó; la picardía de Joaquín Palomo; la regularidad de Enric Coch; el estilo de Rubén Pérez, el carácter de Manolo Reina...De todos se guardaba algo en la retina.
El Nàstic ha visto como setenta porteros se alienaban en el equipo desde el inicio de competición oficial la temporada 1917/18. Ahora toca despedir a Bernabñe Barragán que después de cumplir tres temporadas acumulando 59 partidos, de liga 55, abandona el conjunto tarraconense para procurar escalar más peldaños en su vida profesional
El sevillano tuvo pocs oportunidades en el primer año, en cambio en la temporada siguiente pudo demostrar las grandes condiciones que atesora y más con la peor defensa de la categoria con diferencia que tuvo que soportar sin una queja, Martín no fue justo con él cuando le sustituyó por un desmotivado Becerra. En su tercera temporada en Segunda B tuvo claroscuros, comenzó irregular (como todo el equipo) pero fue enderezando el rumbo y acabó en un excelente estado de forma. Mejoró, gracias al trabajo del entrenador de porteros Ramon Oliva, su juego con los pies.
A parte Bernabé ha demostrado ser un futbolista honesto, implicado con la entidad, sensible con la afición y sobre todo generoso con sus compañeros. Suerte allá donde vayas Bernabé, aquí ya has dejado tu pedacito de historia. Ah¡ y si he de ponerte un adjetivo como a los otros guardametas sería tu elasticidad.
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