Una plantilla coja
Una vida de grana y con un futuro enorme...si se confía en él.
Que le sucede a la plantilla del Nàstic que no acaba de carburar?. La causa tal vez haya de encontrarla en dos razones:; está coja y las oportunidades a los jóvenes de casa se han cerrado a cal y canto. Existen posiciones en el equipo sin recambio natural y en alguna zona no se posee al jugador idóneo.
A algunos futbolistas se les ha encomendado una polivalencia que tal vez cuesta de asumir (Pol Domingo lateral y central; Del Campo en el pivote y en la banda; y Jannick sin una demarcación definida). Para la banda derecha Robert Simón no tiene recambio natural y en el carril izquierdo Nil ho ha dado la talla para jugar por delante de Joan Oriol. Arriba hay cinco delanteros de prestaciones muy diferentes pero que carecen de olfato goleador. La marcha de Pedro Martín y la llegada de Becerra (con sobrepeso) no ha arreglado el déficit goleador.
Pero lo más preocupante está en la sala de máquinas, el único jugador con talante organizador, el balear Fullana se le enseñó la puerta de salida en diciembre y no llegó ningún pelotero y esta circunstancia el equipo lo acusa porque nadie puede leer el tempo del partido y organizar el futbol de ataque.
Y sobre la participación de la cantera hasta la fecha ha sido prácticamente nula: unos pocos minutos para Karim, Victor Valverde y la perla del futbol base Montalvo. Si repasamos las plantillas de los equipos de 1ª División RFEF, exceptuando los filiales, podemos comprobar como la gran mayoría de equipos han apostado por jóvenes jugadores que pueden llegar a ofrecer una rentabilidad económica para sus clubes.
A los entrenadores hay que exigirles resultados pero también que confíen en los futbolistas que despuntan en este caso en la Pobla o en el juvenil de División de Honor.
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