domingo, 14 de diciembre de 2014


Nàstic 2 - 0 CD Olímpic de Xàtiva
Observen el color de las botas del once titular, solo Xisco utilizó el color negro.

   Alejandro de la Sota fue el arquitecto que concibió el edificio del Govern Civil de Tarragona ganador del premio Nacional de Arquitectura; Antoni Gaudí, creó la Sagrada Familia, ejemplo mundial de arquitectura modernista. Las ideas de ambos parten de un mismo enunciado, buscando un idéntico fin, pero discurren por caminos distintos; de la Sota buscó la racionalidad en la línea recta, el genial Gaudí fabricó una obra llena de filigranas, colores y formas variadas. El Nàstic (por lo menos en los partidos de casa) busca un equilibrio similar, tira de oficio (la línea recta) y de vez en cuando se recrea en las filigrana (un modernismo colorista) y le va funcionando.

    El objetivo del Nàstic es llegar al play-off, para ello debe de ganar los partidos, y ahí el equipo ha de buscar lo práctico, generar las menos dudas posibles y procurar no transmitir el nerviosismo de un marcador ajustado a la grada. En ocasiones ganar a un contrincante que viene a no perder, cuesta.  Los granas en cada partido ganan la posesión al rival, pero la clave está en ejercer este dominio del balón en campo del rival y no del propio, eso poco a poco se va logrando a pesar de las dos lineas de cuatro que todos los visitantes plantan durante todo el partido en el Nou Estadi.

   Frente a un flojo Olìmpic los de Vicente Moreno combinaron fases creativas de fútbol ofensivo con otras de excesivo toque horizontal que provocaban el bostezo en la grada. Pero el equipo sabe sacar el oficio cuando es necesario y con cuatro genialidades montan una jugada y dan sensación de peligro. El partido mereció un par de goles más que no llegaron por la lentitud en la definición de los locales; confiemos en que el nuevo fichaje, el manacorí Xisco Muñoz, sea el zahorí que encuentre el agua de los goles.

    El debate que algunos han subido a las redes sociales sobre si el sistema que se emplea es el más idóneo para jugar en una categoría en la que hay que picar piedra cada jornada, lo desacreditan los datos: durante el año 2014 que termina, el Nàstic ha jugado 22 partidos de Liga en casa, con 16 triunfos, 6 empates y 1 derrota, y digo yo, pues tan mal no debe de funcionar el sistema.

1x1 (Puntuación del 1 al 10)

REINA (6): Como tantos españoles, no tuvo trabajo. Intervino más con el pie que con la mano.
GERARD (7): El Alberto Tomba del fútbol, sortea rivales como si fueran puertas de slalom.
MOSSA (6): Profundo pero con excesiva conducción de balón. Faltaron centros.
MARI (8): Atento, midió, cortó, entregó y marcó un gol. Todo bien.
XISCO (8): Mandó en defensa y fabricó el primer gol. Supo jugar el balón.
ROCHA (6): Tuvo altibajos. Arriesgó el pase menos que en otros partidos.
MANOLO (8): El cortafuegos del juego rival. Anticipación y salida con el balón.
LUISMI (7): Perdió la posición de banda, pero por el centro generó peligro.
MARCOS (6): Como Tom Hancks en Naúfrago, aislado. Falló un gol, pero marcó el más difícil.
RAYCO (6): Participativo, pero inefectivo; trabajador, pero poco creativo.
GINER (6): Muy precipitado, poco afortunado a balón parado. Debió aparecer más.
CRISTOBAL (6): Jugó en su posición natural, mejoró; jugó bien al primer toque.
LAGO (6): Le costó entrar en el partido, hizo un par de jugadas brillantes.
JEAN-LUC (-): Salida testimonial.
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