domingo, 23 de octubre de 2016

A pesar de todo lo dicho en el artículo, creo en el Nàstic, porque creo en su presidente Josep Maria Andreu.  (foto Rafel Sierra)


     Después de presenciar el partido frente al Almería y ponerme a escribir su análisis, su disección, me asalta una duda, como tratarlo?, poniendo paños calientes o hacerlo sin tapujos como dicen en Argentina, a calzón quitado. He optado por la segunda opción porque el equipo va dolorosamente en picado hacia el abismo del infierno de la Segunda B y resulta necesario una terapia de choque para invertir la dinámica. 

   El tumor que deriva en la enfermedad que le ha contagiado la incapacidad de ganar al Nàstic se detecta en la pretemporada cuando se dieron bajas muy cuestionables (a excepción de los traspasados) y se firmaron jugadores de perfil bajo que llegaron más por cuestiones externas de empresa que de necesidad de club. La calidad de la plantilla ha descendido dos o tres peldaños con relación a la que acarició el ascenso a Primera División. Más culpa del que ficha que del que alinea. Ninguno de los recién incorporados ha dado muestras de calidad suficiente para configurar una plantilla de Segunda con aspiraciones, salvo los cancerberos Saja (aunque esté muy pendiente de colgar los guantes)  y Dimitresvky (un portero con gran porvenir).

   Repasemos a los nuevos fichajes: Rharsalla (donde más jugó fue en el Huétor Tájar, de tercera); José Carlos (acumula lesiones en todos los clubes en que milita; Maloku (crisálida que aun no es mariposa); Zahivo (siempre en Segunda B y sin destacar); Kakabadze (defensa de apuesta de futuro); Lopo (fuera de forma física); Juan Delgado (del Colo-Colo o del Cuelo Cuelo porque les colaron un gol de bandera); Uche (es una vaga sombra del delantero que fue); Cordero (se acomodó al fútbol griego de nivel más bajo que la Segunda española); Djetei (prácticamente inédito).

    Vayamos al partido. El Nàstic ofreció una imagen ruinosa, patética en algunos momentos, sin carácter, sin alma, con una alineación que sorprendió y no funcionó. Incapaz de llegar a generar acciones ofensivas y con lentitud en la resolución en jugadas defensivas. Fue una caricatura de equipo, un espectro de lo que era la pasada temporada.  Jugar con tres centrales y dos, Lopo y Iago treméndamente lentos tiene el riesgo de que las coberturas lleguen tarde y se origine peligro. La situación es tan agonizante que Moreno ya actúa a la desesperada sin encontrar la solución. Más no se puede explicar porque no hubo. El partido grana fue de bostezo y su derrota del todo justa e inapelable.

El domingo y no es tópico, la primera final...de no ganar se batiría el récord histórico de 12 jornadas iniciales sin vencer.

1x1 (Puntuación del 1 al 10)

DIMITRIEVSKY (7): Fue el más firme, nada que decir en los tres goles fallos de sus compañeros.  Ofrece garantía de seguridad sin adornarse.
GERARD (0): Alguien debería bajarle los humos, necesita una cura de humildad no puede dejar a su equipo con diez. Distraído en el primer gol.
LOPO (3): Se le nota oxidado, lento en las salidas a tapar. Por su experiencia debería de mandar más en la defensa.
IAGO (1): Que alguien m e explique como puede ser titular con la baja forma que demuestra en toda la temporada?. Estuvo evasivo, indulgente y sin intensidad.
MOSSA (3): Desplazado en el primer gol, llegó tarde en el tercero. Se le nota espeso y sin vivacidad en las penetraciones. Precisa descanso.
MOLINA (4): Parte de culpa en el tercer gol. Puso voluntad en intentar comenzar las jugadas ya que nadie lo hacía. Juega algo desorientado.
TEJERA (3): Estuvo escondido muchos minutos, no supo galvanizar el juego. Tampoco logró combinar con sus compañeros. Lento de ideas.
MADINDA (4): Desplazado de posición, estuvo incómodo todo el partido y acabó lesionado. No está al nivel de la pasada temporada.
JUAN DELGADO (2): El amigo invisible, desapercibido y lo poco que hace es tan previsible que nunca engaña a los rivales.
UCHE (1): Se implica poco, en el primer gol tuvo culpa, le falta intensidad y más presión en el área rival. Difícil que vuelva a ser el que fue.
EMANÁ (4). Lo intentó, puso ganas...pero le falta calidad para generar jugadas de gol.
MUÑIZ (3): Apático. Estuvo aislado en la banda y con escasa presencia. 
KAKABADZE (4): Perdiendo no se entendió el cambio. Aportó en defensa pero desaparecido en jugadas de ataque.
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