El futbol está loco, loco. loco

18:26  

Noguera defensa central argentino cedido por Santos

Repasando las noticias del mundo del fútbol en este mes de enero uno se da cuenta que realmente parece un guion escrito por los hermanos Marx o por la muchachada de Monty Python. Cristiano reconociendo que engañó a Hacienda y pagando 19 millones dee uros para eludir la carcel; Boateng  de 32 años (el único jugador que aseguró que se lesionaba de tanto hacer el amor) fichando por el Barça;  Reyes con 36 tacos fichando por el Extremadura que puede fichar gracias al traspaso de Enric Gallego al Huesca, el Reus comprado por Mr. Marshall pero sin que la Liga ni el CSD tengan  conocimiento de ello y con todos los números de no volver a competir;  todos contra el VAR menos el Girona que gracias a la tecnología ha ganado seis puntos y el Nàstic de Enrique Martín alineando como titulares a jugadores que tienen la puerta abierta para conocer nuevos paisajes.

Como se imaginaran me detendré en el caos que reina en la secretaría técnica, dirección deportiva y entrenadores del Nàstic. En teoría sobre el papel el equipo se ha reforzado bien en el mercado invernal (se nota que ya no lleva el timón Arnal Llibert) Imanol, Thiounne, Pipa, Mikel,  Barreda, Noguera y Sakir (añado Salva, ahora ya con ficha profesional) y seguramente una o dos piezas más. El problema están sido las salidas.

Se han marchado Abeledo (inédito), Albentosa (no hacía falta que viniese), Manu Del Moral (un error monumental su ficha), Rocha (se cumplió el adagio de segundas partes nunca fueron buenas), Mejías (otro que se podían haber ahorrado), Dumitru (tiene dos ofertas en el extranjero) y Brugui (que se va al Extremadura en calidad de fichado) que podía haber marchado cedido. Para acabar de vaciar el vestuario de lastre deben abandonar Cadamuro, Tete (que lleva la temporada pasando de todo) y Omar Perdomo (una ficha alta que veremos quien la paga).

Ante tal lio va Enrique Martín, que hasta el momento está siendo más eficaz en las sala de prensa que en el césped y coloca en el once titular a dos jugadors que dicen por activa y pasiva que quieren pirarse (Tete y Manu) y ambos juegan un partido patético y para completar el once coloca a Javi Jiménez en una alarmante baja forma.  Que alguien lo explique y justifique. Ha perdido el vestuario la confianza en Enrique Martín?

Para que el Nàstic intente la salvación que ya apunta ha milagro debería de reinar la cordura, la coherencia y la responsabilidad.

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