El día que el Alcoyano humilló al Nàstic

20:47  

Hoy les vamos a contar otra historia surrealista del Nàstic aprovechando la visita del domingo a El Collao. Todo comenzaba en la última jornada de la Liga 1948/49; los granas recibían en la Avinguda Catalunya al Deportivo, si los gallegos ganaban se salvaban y enviarían al Alcoyano a Segunda. El Nàstic con la permanencia asegurada, se dejó ir y perdió 1-4. 

En la siguiente temporada los granates quedaron penúltimos pero por ampliación de la Primera División a dieciséis equipos no se produjeron descensos y los dos últimos Nàstic y Real Oviedo deberán promocionar frente a los  dos subcampeones de Segunda, Real Murcia y Alcoyano. El sorteo deparó un enfrentamiento, nada deseado en Tarragona, a partido único entre catalanes y alicantinos a jugar el 2 de julio en Sarriá.

La Liga había finalizado en el mes de abril y la plantilla del Nàstic se encontraba dividida, muy decaída y con atrasos de cobro pendientes. Tal era el mal ambiente que la junta de salvación encabezada por Ricardo Forés que había reemplazado a la dimitida encabezada por Joan Ricomá, se planteó la renuncia al encuentro de promoción porque ya se intuía algo raro.

Presuntamente una delegación del CD Alcoyano se reunió una semana antes del partido con cuatro jugadores del Nàstic en un café de Barcelona con el fin de arreglar el partido. En Tarragona la junta estaba con la mosca tras la oreja y para evitar sobresaltos, dos días antes del encuentro se puso al días con los atrasos de los jugadores

El viernes 30 de junio el Nàstic se concentraba en un hotel de l'Espluga de Francolí con el técnico Domingo Balmanya que sustituyó a Pepe Nogués que había dimitido dos meses antes. Un grupo de jugadores presionó al entrenador para que no alineara a Camilo Roig y este accedió.

Cerca de 400 aficionados del Nàstic acudieron a Sarriá. Según la crónica de Diario Español firmada por David Castillo, el equipo demostró una indolencia superlativa y unas torpezas injustificadas, también añadió que mientras los jugadores del Alcoyano corrían algunos del Nàstic andaban.

El encuentro tuvo muchas alternativa; a los 6 minutos Nasio ante la pasividad de Dauder ponía el 0-1; Bravo empataba a los 32, 1-1; Bolinches de penalty ponía el 1-2, minutos 38; Alsua de penalti empataba en el 51, 2-2; Alsua lograba el tercero en el minuto 65 (3-2); y Quisco en el 73 lograba el 3-3, forzando la prórroga.

El añadido fue un escándalo, una mayúscula vergüenza, Quisco a los 2 minutos lograba el 3-4 en fallo garrafal del meta grana; tres minutos después Vinuesa ante la pasividad de Ernesto ponía el 3-5 y en el 105 el mismo jugador dejaba el definitivo 3-6. Los granates tenían prometidas 5.000 pesetas por cabeza si eliminaban a los alicantinos.

Al día siguiente la Junta Directiva en reunión de urgencia tomó el acuerdo de sancionar a los jugadores Vicente Dauder, Gabriel Taltavull, Ernesto Llobregat y Bartolomé Murillo con multas de 7.000 pesetas y la rescisión de sus contratos, además de comunicar a la RFEF el comportamiento sospechosos de dichos futbolistas.

En la nota  también se hacía constar el agradecimiento por la entrega y pundonor demostrado por los futbolistas Andreu Catalá y Alfonso Perdomo batallando todo el partido. El Nàstic tardaría 56 años en regresar a la Primera División. 

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