Alfredo Distefano de grana
El ilerdense Mario Durán en la etapa en el Real Madrid. (Foto de Alberto Cosin)
De los seis mejores futbolistas de la historia he tenido el privilegio de ver en acción a cuatro de ellos, a dos Pelé y Kubala no tuve la oportunidad de verlos en directo. Pero a Cruyff, Maradona, Messi y Di Stefano los pude disfrutar. Además a don Alfredo vistiendo durante cuarenta y cinco minutos la camiseta del Nàstic en un amistoso ante el FC Barcelona en noviembre de 1963. Aquella noche Di Stefano, que defendía los colores del Espanyol, a sus 38 años dio un recital de calidad, colocación y clase.
El domingo el equipo tarraconense visita el campo que lleva su nombre para enfrentarse a los cachorros del Real Madrid. El astro argentino llegó a España para jugar con el Barça pero las artimañas del gobierno franquista lo vistieron de blanco, algo que años antes no pudieron lograr con el húngaro Ladislao Kubala, el argentino fue el primer jugador total que emergió en el futbol de finales de los cincuenta que defendía, se asociaba, regateaba, disputaba los balones y además tenía gol.
Pero Di Stefano tiene otra historia asociada al Nàstic; la temporada 1974/75 el directivo del Nàstic Josep Maria March se trasladó a Madrid para convencer a la Saeta Rubia de entrenar al conjunto tarraconense. Fue una larga noche de negociación con una botella de güisqui y unas pretensiones inasumibles: cinco millones de pesetas más uno adicional si el equipo se mantenía y el alquiler de un chalet en Salou. Al final vino Javier García Verdugo por la mitad y sin residencia pagada.
Según me comentó el directivo March, Di Stefano les prometió dos cedidos del Madrid, Vicente del Bosque que acababa una cesión en el Córdoba y Juan Morgado un buen lateral zurdo. El R.Madrid ya había ayudado al Nàstic la temporada 1962/63, cediendo a Mario Durán que había jugado 10 partidos con los merengues en Primera marcando cuatro goles.
Sería un club modesto como el RCD Español quien lograría la temporada 1963/64 juntar a las dos grandes estrellas en el ocaso de sus carreras: Kubala y Di Stefano, casi nada. El domingo viendo el Real Madrid Castilla (entrenado por otro mito del madridismo Raúl González) Nàstic recordaremos aquella primera parte del bonaerense luciendo la elástica granate.
____________________________________________________________
Comentarios: