Qué entendemos por jugar bien?

18:32  

 

Jugada del partido Castellón-Nàstic del pasado domingo. (Diari MES)

El futbol genera controversia, polémica y debate desde que a mitad del siglo XIX lo inventaron en Inglaterra. Hasta hace un par de décadas el foto habitual  donde la pasión se desbordada era la barra de los bares y cafeterías a la hora del aperitivo o con el carajillo compartiendo la partida de mus o dominó. Aquellos comentarios a veces primarios e injustificados, otras llenos de sabiduría futbolera se evaporaban tan rápido como el humo de las farias.

Ahora las críticas despiadadas, sin filtro, coherentes e incoherentes se incrustan en las redes sociales y permanecen orillando el buen hacer de algunos futbolistas. Todos nos creemos entrenadores y mandamos a la hoguera del deshonor a aquellos jugadores que no nos caen bien o no juegan como nosotros pensamos que deberían de jugar.

Existen frases demoledoras que emitimos sin justificar: el equipo no ha jugado bien; se ha jugado mal; un partido de bostezo; solo pensamos en amarrar; existe miedo a atacar...perfecto, todo el mundo es libre de opinar. Pero hay que matizar. Para aseverar que se ha jugado bien o mal que baremo utilizamos?, el que nos proyecta televisión de los partidos de Champions o Europa League?, el que vemos hasta el empacho de la LFP?.  

Hemos de ser equidistantes, no es fácil, pero la valoración siempre debe de hacerse en función del escalón en que compite tu equipo y el Nàstic lo hace en el tercer peldaño del futbol español. El noventa por ciento de jugadores de la 1ª División de la RFEF no han encontrado hueco en la categoría profesional, por tanto el grado de exigencia  debe de ser compatible con la calidad que poseen para esta categoría.

Todo viene a colación porque algunos, bastantes, comentarios apuntan a que el equipo el domingo jugó mal. Vale, y el Castellón con este mismo criterio jugó bien?. Articular un buen sistema defensivo también puede llegar a ser un arte como el contrataque o los remates a puerta. Cierto que el Liverpool, el Bayern, el Atlético de Madrid o el Barça hubiesen jugado mejor en Castellón, pero el Nàstic con las armas de que dispone compitió, jugó y sumó un punto.

Otro debate distinto sería porque no se fue a por el partido cuando lo tenía de cara, pero ahí interviene el instinto del futbolista que ante el grado de exigencia de la categoría reflexivamente pueda considerar que el empate era de oro.

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