domingo, 27 de mayo de 2018




Disculpas por que el texto no se enganchó a la foto. En el 99% de los partidos en los que un equipo no se juega nada y el rival la permanencia, suele ganar el equipo necesitado. En esta jornada ocurrió al cien por cien. El Nàstic viajó a Huesca convencido de que si hacía las cosas bien el contrincante no le pondría en muchos aprietos. Y así fue,

El Nàstic no cuajó un partido brillante pero si práctico y con la cabeza fría. Lo que no podía perder el equipo era ni la paciencia, ni la posición sobre el césped. En la primera parte los tarraconenses vigilaron en defensa, no pudieron generar demasiado fútbol y arriba lo probaron en cuenta gotas. Tejera y Márquez aparecieron poco y en el balcón del área nadie llegaba a las segundas jugadas. Lo mejor el empate a cero.

Cuando Gordillo se decidió a agitar el partido con la entrada de Uche y Dumitru el equipo le puso una marcha más y el olfato nos decía que el gol llegaría. La persistencia y el dominio de la posesión, ante un Huesca que poco a poco se deshinchaba (menos Cucho, tal vez el mejor delantero junto con Mata de la Segunda), daría sus frutos en el minuto 70. Los restantes veinte minutos no fueron ni de agobio, ni de padecer por el resultado. La inquietud aparecía porque el resto de marcadores entraban en la lógica del final de temporada. Por cierto el colegiado anotó una tarjeta amarilla a Tete...que se encontraba fuera de convocatoria.

El equipo supo defender la exigua ventaja sin relajarse y con una intensidad necesaria. Fue un partido de escasas ocasiones, pero lo que valía era el triunfo y se obtuvo merecidamente. El primer match-ball se salvaba y ahora tocar ganar a otro equipo de Primera, el Rayo, pero que con el Nou Estadi a rebosar estoy convencido que se logrará.

1x1 (Puntuación del 1 al 10)

DIMITRIEVSKI (6): Partido plácido, poco exigido por el rival, pero volvió a acreditar una tranquilidad que había perdido en los últimos partidos.
KAKABADZE (6): Sobrio en defensa, evitó driblar en exceso y subió la banda lo justamente preciso.
PLEGUEZUELO (6): No se complicó, estuvo atento a la velocidad de Cucho. No perdió nunca la posición.
MOLINA (6): Partido completo, sin arriesgar. Contundente, se entendió bien con sus compañeros.
ABRAHAM (7): Cortó el tráfico que hubo por su banda. Subió en varias ocasiones pero malogró los centros excepto el que dio paso al gol.
MATILLA (7): Puso orden en la zona de máquinas; muy activo ganó balones divididos y supo oxigenar el juego.
TEJERA (5): Desaparecido en el primer tiempo, se le vió más en la reanudación, pero no fue un jugador desequilibrante.
JEAN-LUC (5): Gris, no pudo romper por su costado y pisó poco el área rival. Demasiado encorsetado.
MARQUEZ (5): Dos acciones y poco más: no pudo filtrar balones. No se encontró a gusto sobre el césped.
MANU (7): Infatigable, luchó cada balón pero con poca fortuna, mejoró en el segundo tiempo al estar con Uche.
ALVARO (6): Le faltaron apoyos, hizo un par de acciones pero no las pudo culminar. Se fue apagando.
UCHE (8): Otro gol que sirve para media permanencia. En el área es letal. Se le vio involucrado.
DUMITRU (6): Le puso electricidad al partido, encendió la luz de la victoria, a veces es demasiado individual.
FALI (6): Pocos minutos que impregnó de carácter y raza.

GORDILLO (9): Gran planteamiento. Dejó madurar el partido evitando errores en defensa y cuando vio que el Huesca bajaba físicamente hizo un doble cambio que resultaría fundamental, también acertó en el tercero para aguantar el resultado





























































































































































































































































































































































































































































Bonito detalle, pasillo del Nàstic al recién ingresado en la Liga Santander.

El final de la Liga suele ser como una película del oeste, siempre pierden los malos y ganan los buenos. En el fútbol el 99% de las veces en los partidos en que un equipo se juega la permanencia y el rival nada, gana el necesitado. Ayer sucedió tres cuartos de los mismo. Para el cierre de la competición hasta seis equipos se juegan un puesto de descenso (Alcorcón, Nàstic, Córdoba, Albacete, Leonesa y Almeria). Aguardan 90 minutos de infarto.

El Nàstic visitó el Alcoraz con el Huesca recién ingresado en la Primera División en una semana llena de celebraciones. Desde la distancia todo hacía suponer que el grado de intensidad de los oscenses tendría altibajos durante el encuentro y el Nàstic debía de derrochar la gallardía suficiente para contrarestar la diferencia de nivel entre ambas plantillas.  Más o menos así sería.

De salida Gordillo optó por un equipo que le pudiese controlar el partido y que tuviese llegada pero también sentido del sacrificio defensivo. Lo logró a medias porque Tejera volvía a estar desaparecido y Márquez surgió en cuentagotas. Tampoco rompía Jean Luc por la banda y arriba pocas opciones para segundas jugadas. El empate sin goles al descanso no era mal resultado.

Los cambios aportaron ritmo al encuentro que es lo que le haría daño a un Huesca con unos días con escasa sesiones de entrenamiento. Uche y Dumitru generaron electricidad para encender el partido el gol a veinte minutos del final y viendo la actitud de los azulgranas hacía presagiar que los tres puntos se irían para Tarragona.

No fue un partido vistoso, ni el Nàstic maravilló con su fútbol, pero si que hubo precauciones para no encajar y la creación de media docena de jugadas que presumían que el gol de la esperanza podía llegar. El Nàstic salvó el primer match-ball. El domingo el segundo y definitivo pero con muy buenas sensaciones.

PUNTUACIONES (1 al 10)

DIMITRIEVSKI (6): Volvió a dar muestras de tranquilidad en un partido del todo apacible. Muy atento en la anticipación.
KAKABADZE (6): Menos visible en ataque pero en cambio estuvo muy atento en cerrar la banda y no perder el balón.
MOLINA (6): Hizo de muralla y ágil a los desmarques del Cucho (uno de los mejores delanteros de la Segunda).
PLEGUEZUELO (6): Arriesgó lo justo, se avanzó al delantero y tuvo pocas situaciones comprometidas.
ABRAHAM (6): Intentó regular el tráfico existente por su banda, realizó varias subidas que malogró con el centro.
MATILLA (7): Supo poner orden en el centro, ganó balones divididos y procuró hacer jugar al equipo.
JAVI MARQUEZ (5): Bastante gris, tuvo dos lanzamientos a balón parado que provocaron peligro. No encontró su sitio.
TEJERA (5): En la primera parte ni se enteró del partido, en la segunda mejoró pero sin marcar diferencias.
JEAN-LUC (5): No logró romper por la banda ya que estuvo vigilado; se añoró sus pisadas de área.
ALVARO (6): Tuvo pocas ayudas pero logró generar un par de ocasiones pero sin final feliz. Le faltó verticalidad.
MANU (7): Incansable; en el primer tiempo no tuvo excesiva brillantez pero en la continuación estuvo más activo e hizo trabajar a los centrales.
UCHE (8): Otro gol que acerca a la permanencia. Estuvo bullidor y con ganas. Supo ayudar en trabajo defensivo.
DUMITRU (6): Salió muy enchufado e hizo daño en la banda. Deber dejar de ser tan individualista.
FALI (6): Pocos minutos pero supo transmitir la garra y el carácter que precisa el equipo.

GORDILLO (9): Alineación coherente para ir madurando el partido sin tomar riesgos defensivos. Luego un inteligente doble cambio para percutir en el área rival y un último cambio para aguantar el triunfo. Inteligente.
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