viernes, 19 de mayo de 2017

Última alineación hecha por Juan Merino?

      Este equipo se está gripando en las últimas vueltas; se para como el Toyota de Carlos Saiz a 700 metros de la meta; se ha convertido en un vehículo con el GPS estropeado, con la caja de cambios bloqueada y con el carburador obturado.  Hemos visto en Vallecas un equipo en decadencia, con una fútbol arcaico e inofensivo incapaz de amedrentar al rival. La defensa estuvo bien cosida, con costuras y sin flecos hasta los lances finales del primer tiempo, luego en la reanudación vinieron los descosidos, Perone primero y luego Gerard, rompieron la tela de araña. 

       En la semana de pasión vivida por el equipo no hubo jornada de resurrección, sino resignación. A Merino se le vio callado, como ausente, como en el soneto de Pablo Neruda. Y si ayer no le hicieron la cama, fue porque no encontraron las sábanas. Con una alineación de corte ofensivo, con pólvora para hacer un correfoc, el balance final de los noventa minutos fue como una tronada de Colla infantil de Diables. 

         Volvieron, como las oscuras golondrinas, las pérdidas de balón en el balcón del área rival, el empecinamiento en recorrer metros y más metros con el balón cosido a los pies, incluso al final hubo un auténtico anatema futbolístico centro de Barreiro para que rematara Muñiz. No hubo descaro, hubo recato, no hubo riesgo y a pesar de ello se recibieron dos goles. No salieron a morir con las botas puestas, sino a sobrevivir.  Además el sistema táctico con la posición dudosa de Luisme (atrás o en medio) no funcionó porque los jugadores andan escasos de confianza.

       El Rayo hirió con los puñales por las bandas y se solidificó en el medio con un Trasorres, hábil y gañán; no sirve de excusa ni la mano de Gazzaniga, ni los dos tiros de Manu, el Nàstic estuvo huérfano de capacidad goleadora. Tampoco los cambios ayudaron: Emaná fue una sombra,  Madinda no encontró la posición y Muñiz puso voluntad, ah¡ y mientras Delgado estaba en el campo menos activo que el asistente de Arias López que hizo un buen arbitraje.

      La que se avecina se va estrenar antes en el Nàstic que en Tele5, porque el futuro, los tres partidos o sea los nueve puntos finales se presentan dantescos (y ya saben que Dante bajó a los infiernos para encontrarse con su amada Beatriz); la chistera de Merino ya no tiene ningún conejo escondido y la plantilla me huelo que tira a encefalograma plano. En el momento de cerrar éste análisis cara a la próxima temporada me veo más en campo del Atlético Saguntino que en el Nuevo Zorrilla. Ojalá me equivoque. Si el Nàstic se salva les prometo que la última crónica la escribiré en verso.

1x1 (Puntuación del 1 al 10)

REINA (5): Paró un buen disparo; en el segundo está tapado. Duda en las salidas y juega excesivamente nervioso. No imprime confianza.
GERARD (4): No tapó el disparo del gol. Subió hasta la cocina pero después regala el balón y no baja para cubrir a su par.
MOSSA (4): No se desdobló y sufrió en la penetraciones del rival. Lejos de su mejor estado de forma.
MOLINA (5): El único que cumplió en la zaga. Ganó balones divididos y achicó pelotas de manera práctica.
PERONE (3): Imperdonable el fallo de marcaje a Manucho. Antes tuvo otro despiste, en Vallecas muy gris y lento.
TEJERA (4): Impreciso a balón parado, apareció poco. Se notó en falta su capacidad de creación.
LUISMI  (5): Activo pero poco efectivo por su posición tan retrasada. Notó la escasez de apoyos en los contragolpes.
JEAN-LUC (5): Se pegó bien a la banda e inició jugadas pero sin pisar el área ni hacer daño con los centros.
LOBATO (4): Perdió balones que no recuperó. Labor más de destrucción que creativa. No alimentó de balones a los puntas.
DELGADO (3): Alguna pincelada en la primera parte, en la segunda supimos que estaba cuando había algún plano corto.
MANU (6): El mejor, lo intentó en cuatro ocasiones, buscó el gol y peleó sin suerte. Muy desasistido.
EMANÁ (1): Se entiende perfectamente porque Merino no cuenta con él. Una caricatura del jugador de la pasada temporada.
MADINDA (3): Entró con el partido entregado y no supo ubicarse en el césped.
MUÑIZ (5): Pocos minutos pero dos remates a puerta. 
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