miércoles, 10 de octubre de 2018


Rocha el jugador del Nàstic que ha dado mas pases.

Decir ante todo que me siento muy orgulloso de haber sumado 400.000 visitas en 600 entradas en este blog y poco más de seis años de vida. Gracias a todos. Hoy no voy a hablar de cine, lo digo por el título ya que  La posesión es una película de 1981 que fue Palma de Oro en Cannes y trata de un engaño de pareja que en el fondo no es tal. Y si, se parece al tema a tratar.

La posesión del balón es un término que se ha inventado a raíz de la metamorfosis que Pep Guardiola le dio al futbol desde el Barça. Hasta entonces a estas demostraciones de superioridad con el esférico le denominábamos dominio territorial. Ahora los gurús balompédicos ya sea en la función de comentaristas o como tertulianos se debaten entre si la posesión no será un truco de trileros o una manera de esconder las falencias.

Mi primer recuerdo devsuperioridad con el balón de protagonista se remonta al Mundial de México 1970 cuando la selección de Brasil que se hizo con el cetro; los brasileños dominaron gracias a un futbol-samba con artistas de la talla de Pelé, Tostao, Rivelino, Jairzihno y Carlos Alberto. Nadie habló aún de posesión pero la hubo y sobre todo resultó efectiva. Cuatro años después apareció la naranja mecánica, la selección holandesa practicó un futbol total de posesión controlada ahí estaban Cruyff, Rep. Neeskens, Krol y Resembrick. Fue un juego sin recompensa porque los holandeses tan solo lograron subcampeonatos.

Será con la llegada de Johan Cruyff al banquillo del Barça (1988) cuando la posesión del balón comience a ser un factor determinante en el juego blaugrana. Pero no se conocerá como tal  hasta la llegada de Guardiola veinte años después cuando la posesión se convierta en un axioma, una religión que le proporcionará una catarata de títulos. La selección española primero con Luis y luego con Del Bosque copió el modelo y logró dos Eurocopas y un Mundial. Nadie discutía la importancia de la posesión.

A nivel mundial en los dos últimos años ha comenzado a cuestionarse la posesión. Surgen preguntas: en que zona del campo es más valida la posesión?, todos los equipos pueden apuntarse a este sistema de juego?, son todos los jugadores efectivos para aplicarla?; si no produce frutos se tiene que persistir en su utilización?.

En el Mundial de Rusia, el seleccionado español en el partido contra el anfitrión llegó al 72% de posesión y quedó eliminado. En la última jornada de Liga hubo dos casos paradójicos, en el Luis Casanova el Barça llegó a los 956 pases y al final solamente rascó un punto; en el Ramón de Carranza, el Nàstic (con 2.444 pases el equipo que menos realiza en la Liga 1.2.3) por primera vez tuvo más posesión que el rival y logró el empate y a punto estuvo de lograr la victoria.

En la Segunda División los sistemas han de ser camaleónicos para contrarestar al rival; posesión si pero siempre que exista una justificación táctica y unos jugadores que puedan desempeñarla. En ocasiones el juego directo puede resultar mucho más efectivo.
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